El crédito seguirá llegando con cuentagotas en 2013
La reestructuración del sector bancario español, casi completa, no bastará para que el crédito vuelva a fluir a familias y empresas en 2013. La economía sigue demasiado endeudada y las entidades financieras tendrán dificultades para acudir a los mercados mayoristas.
El manual básico del rescate reza que la inyección de capital a los bancos españoles -que finalmente rondará los 40.000 millones de euros- es el primer paso para que el crédito vuelva a fluir a familias y empresas. Eso reza el manual, pero la realidad es bastante más complicada y tozuda.
Tanto los gestores de entidades financieras como los analistas consideran imposible que la financiación pueda mejorar en 2013. "Todavía quedan uno o dos años de desapalancamiento en España", explicaba recientemente José Oliú, presidente de Banco Sabadell. "Hasta que la banca no reduzca significativamente su endeudamiento no volverá a acceder con normalidad a los mercados mayoristas", apuntaba Oliú, lo que hará difícil que el crédito se recupere antes de 2014.
El punto álgido de la expansión crediticia se produjo al cierre de 2008. En aquellos momentos en que los responsables políticos proclamaban a los cuatro vientos que la crisis financiera internacional no afectaría a España porque aquí no había productos tóxicos ni hipotecas subprime, la cartera de préstamos en manos de la banca alcanzó su máximo histórico: 1,87 billones de euros. Por aquel entonces, pocos atisbaban la magnitud de los problemas que se venían encima, pero el cáncer de ladrillo ya carcomía los balances de las entidades financieras españolas.
Cuatro años después, con el 30% del sector bancario nacionalizado o muy debilitado y el volumen de créditos impagados acercándose a los 200.000 millones de euros, la dieta de adelgazamiento que está observando la industria no solo no se moderará en 2013, sino que se hará más rigurosa, complicando mucho el acceso a préstamos a familias y empresas. La contracción del crédito en 2012 será del 5% y los expertos vaticinan que la reducción será similar el próximo año.
"Cuando comenzó a funcionar el euro se produjo un proceso de convergencia de la economía española hacia la media europea muy rápido", explica un experto economista de una entidad financiera española. "El problema fue que ese crecimiento estuvo cebado por un exceso de endeudamiento, que todavía hay que corregir". El porcentaje de préstamos en manos de los bancos, en relación al PIB, es del 155%, frente al nivel medio del 105% en el conjunto de la eurozona. Aún queda camino por recorrer.
Volviendo al manual básico del rescate, la teoría apunta que el fuerte saneamiento que ha realizado y sigue realizando el conjunto de la banca española (cifrado por la firma Merrill Lynch en 260.000 millones de euros, entre 2007 y 2013), junto con la creación de un banco malo que agrupará los activos tóxicos, deberían facilitar el camino para que los inversores internacionales recuperen su confianza en el sector y que las entidades puedan volver a realizar emisiones a precios razonables.
"La incertidumbre sobre la sostenibilidad de nuestras entidades debería ir desapareciendo y las condiciones de financiación mejorando, con importes y plazos más amplios y menores diferenciales", explica Esteban Sánchez, socio de Analistas Financieros Independientes (AFI), que pone como ejemplo la emisión realizada por BBVA esta semana.
Estas progresivas mejoras también permitirán que la banca española reduzca su dependencia hacia la liquidez del Banco Central Europeo (BCE), algo que ya se ha empezado a apreciar en los datos de septiembre y octubre.
Las imposiciones de Bruselas
Otro de los condicionantes para el acceso al crédito serán las condiciones impuestas por la Unión Europea hacia las cuatro entidades financieras que han recibido apoyo público proveniente de la Unión Europea (Bankia, Catalunya Caixa, Novagalicia y Banco de Valencia, adquirido esta semana por Caixabank). El mandato Bruselas les obliga a reducir su balance cerca de un 60%. Bankia, que esta semana presentó su plan de negocio, reconocía abiertamente que tendría que limitar la concesión de préstamos a particulares. De la nueva producción hasta 2015, tan solo el 15% irá destinado a familias. El resto será para las pymes.
A ello se une que en el pliego de condiciones impuesto por el Eurogrupo para aceptar el recate, también se incluye la obligación de que estas entidades tengan el mismo nivel de créditos, que de depósitos. Esto provocará, además de una acentuación de la guerra del pasivo, un corsé a la hora de dar créditos.
Análisis, sector por sector
ParticularesLos altos niveles de desempleo, que se mantendrán en 2013, limitarán la posibilidad de acceso al crédito de muchas familias, al igual que la reducción de la renta disponible por las subidas de impuestos y la limitación de salarios. Las amortizaciones de créditos antiguos seguirán superando al nuevo crédito.EmpresasEl sector promotor y otros vinculados con el ladrillo seguirán desapalancándose. Sin embargo, las empresas vinculadas al sector exterior mejorarán su situación y conseguirán financiación bancaria sin muchos problemas.AdministraciónLas administraciones públicas han sido las organizaciones que más han aumentado su crédito con bancos durante los últimos años. Aunque algunas presentan problemas de solvencias, los expertos creen que el conjunto seguirá logrando financiación durante 2013.M. M. M.