Siemens descoloca al mercado
La jugada de 2.800 millones de dólares de Siemens en la señalización ferroviaria ha cogido por sorpresa al mercado. La mayor compañía alemana se ha abalanzado sobre Invensys, ofreciendo una suma cercana a la capitalización bursátil total del grupo británico por una unidad que genera la mitad de su beneficio operativo. Esto ha desubicado a los analistas y a los inversores, pero pese al precio, una estrategia lógica y las sinergias pueden hacer que el trato valga la pena.
Al precio final, la compra se ha realizado a un elevado nivel de 15 veces el beneficio operativo histórico de Invensys Rail. Pero Siemens ve muchas posibilidades de ahorro de costes, y un pequeño impulso de la venta cruzada. Unidas, las sinergias podrían elevar el beneficio operativo en 100 millones de euros anuales. Gravados al 29%, y capitalizados al múltiplo de cotización de Siemens de ocho veces su ebitda, equivaldrían a 700 millones de euros.
También tiene sentido industrial. Los gobiernos quieren sacar el máximo partido de las sobrecargadas infraestructuras de transporte. Las altas tecnologías incluidas en este acuerdo ayudan a que las redes ferroviarias funcionen de forma más segura y con una mayor capacidad.
Invensys ha estimulado las conversaciones para una venta durante años. Pero sus grandes déficits de pensiones parecían un importante veneno: estos son abordados ahora con una inyección de efectivo de casi 500 millones de euros.
La incertidumbre sobre este aspecto había espantado a muchos de comprar acciones. El atractivo estratégico de la unidad pasó desapercibido, y el precio final a pillado a todos por sorpresa. Bank of America había valorado la filial de Invensys en 462 millones de euros menos.
El presidente de Invensys, Nigel Rudd, criticó en 2007 a los "estúpidos" analistas que infravaloraron Alliance Boots antes de su venta. El veterano negociador tiene tarea que acabar ahora. Invesys bien podría atraer la mirada de Emerson, General Electric y otros gigantes industriales.