Fomento quiere una Iberia "española" que conecte el país con Suramérica y Europa
El Gobierno fijó ayer su postura en torno al plan de ajuste y el conflicto laboral abierto en Iberia: "Es la primera vez que me voy a referir al tema", advirtió la ministra de Fomento, Ana Pastor, en el Foro CincoDías, patrocinado por Sabadell y Accenture, "queremos una aerolínea que siga siendo española, que atienda el largo radio desde España y mantenga el corto y medio".
Las declaraciones de Ana Pastor en el Foro Cinco Días fueron de rechazo a cualquier debilitamiento significativo de Iberia en favor de British Airways, con la que la aerolínea española forma el holding IAG. "Queremos que nuestras empresas del sector aéreo sigan siendo españolas", remarcó la representante del Gobierno. Desde Fomento también se oponen a una hipotética renuncia a rutas que enlazan este país con las principales ciudades de Latinoamérica y Europa.
A las puertas del madrileño hotel Intercontinental había un grupo de trabajadores de la aerolínea, protestando pancarta en mano, mientras el consejero delegado de Iberia, Rafael Sánchez Lozano, escuchaba dentro las recetas de la ministra. Hubo mensaje contundente para ambas partes: "España no se puede permitir conflictos en sectores estratégicos como el aéreo", señaló.
Pese a la actual crisis, la escalada en los precios del combustible y advertir que el AVE ya compite con Iberia en rutas domésticas, Fomento pide un plan de viabilidad a largo plazo que suponga el mínimo sacrificio para el empleo. "Todos deben ser responsables y arrimar el hombro", exige Pastor.
La compañía tiene sobre la mesa un Plan de Transformación que implica 4.500 despidos, rebajas salariales del 25% al 35% y la renuncia a 25 aviones, con lo que la producción bajaría un 15%.
Ana Pastor reconoció la libertad de empresa de una firma de capital privado como es Iberia, pero reclamó un papel de "regulador" para el Gobierno por cuanto se trata de una compañía estratégica para el país: "Es nuestra obligación garantizar la conectividad aérea y debemos cuidar rutas importantes con América Latina y Europa, además de las peninsulares y las que conectan con las islas, Ceuta y Melilla". Durante varios compases del discurso, Ana Pastor se refirió al concepto de servicio público obligatorio "por el que Fomento debe velar".
Riesgo para Barajas
La representante del Gobierno en materia de infraestructuras y transportes trató al sector aéreo como un motor de la economía. Solo en la Comunidad de Madrid genera el 15% del PIB y de él dependen 440.000 puestos de trabajo directos e indirectos. Pero fue más allá de las cifras: "El aéreo es un campo vertebrador del territorio. Además, el 70% de nuestros turistas llegan en avión". La protagonista ayer del Foro cree que una guerra en Iberia pone en jaque a la marca España.
Otro riesgo que aprecian desde el Gobierno, si Iberia pierde influencia, es el de la degradación de Barajas como uno de los principales hubs del sur de Europa. La inversión pública en la modernización del aeropuerto superó los 6.000 millones de euros, "que están sin pagar".
La intervención de Ana Pastor antecede al esperado calendario de huelgas que los sindicatos con representación en Iberia harán público mañana. El personal de tierra y tripulación de cabina de pasajeros -el 90% de la plantilla- pretende parar entre el puente de diciembre y las Navidades, probablemente entre el 14 y el 21 del próximo mes. Se prevé que los pilotos se queden al margen de las movilizaciones al estar afectados por un arbitraje, que debe repetirse por sentencia judicial, que les obliga a la paz social.