_
_
_
_
Ofertas con fuertes descuentos

La banca recurre al alquiler para aligerar el stock de casas

La sequía que atraviesa el mercado inmobiliario ha provocado que las entidades busquen alternativas para rentabilizar sus inmuebles.

El mercado inmobiliario continúa en estado comatoso. Y es que, aunque las ventas de casas subieron un 0,9% en septiembre animadas por los cambios fiscales que se avecinan, lo cierto es que la caída de las cifras es un hecho. En este contexto, la banca se ha convertido en la propietaria de la mayor parte del stock de casas a raíz de las numerosas hipotecas impagadas. La dificultad para acceder al crédito, además, ha complicado de una manera evidente la salida de este excedente, por lo que desde hace tiempo las entidades financieras ofrecen descuentos en los precios de venta e, incluso, rebajas adicionales en determinadas promociones.

Ante esta complicada situación, el alquiler se ha alzado como una alternativa atractiva. En 2006, en plena burbuja inmobiliaria, el porcentaje de familias que residía en un piso de alquiler era del 13,56%, mientras que en mayo de este año la población que se decantaba por esta opción era del 17%. Pese a todo, esta cifra aún está lejos de llegar a los niveles de algunos países de Europa. La media europea alcanza el 30% e incluso en algunos países como Alemania escala al 47%.

De hecho, para fomentar el alquiler y facilitar el acceso a la vivienda, la ministra de Fomento, Ana Pastor, presentó hace poco más de seis meses una flexibilización de la normativa de arrendamientos urbanos relativa a la duración de los contratos de alquiler. Como ingrediente añadido, la necesidad de aumentar la oferta de alquiler llevó al Gobierno a dar otra vuelta de tuerca al impuesto de sociedades el pasado mes de agosto. A partir de ese momento, las empresas que invirtieran en vivienda para el alquiler pasarían de tributar del 10% al 8% por el valor del inmueble, con excepción de las Socimi (sociedades anónimas cotizadas de inversión en el mercado inmobiliario), que dejaban de pagar al fisco.

Con este telón de fondo, las entidades han puesto en marcha plataformas para el alquiler de viviendas. Un stock en el que predomina la obra nueva, de las promociones que han asumido las entidades por créditos fallidos al promotor, pero en el que también se encuentran viviendas de segunda mano a precios más asequibles y llegadas a la entidad por desahucios o daciones en pago.

Bankia, por ejemplo, ofrece viviendas en alquiler a través de Bankia Habitat, una filial en la que se agrupan todos sus activos inmobiliarios. La entidad, una de las más expuestas al ladrillo, ofrece en alquiler viviendas de segunda mano que van desde los 180 euros por un piso de tres dormitorios en Alicante, a los 850 euros por uno de cuatro habitaciones en Madrid capital. El banco pide a los interesados que realicen un contrato de reserva del alquiler, previo a la firma, en el que se exige la retención del importe de la renta de un mes en una cuenta de la entidad mientras se estudia la idoneidad del cliente. Asimismo, en la cartera de la entidad abunda la oferta de pisos de segunda mano en venta con precios a partir de 30.000 euros en Madrid capital o 10.000 euros en localidades valencianas.

Por su parte, BBVA gestiona sus inmuebles en alquiler tanto a través del portal BBVA Vivienda como a través de pequeñas inmobiliarias locales. La web de la entidad ofrece casas con descuentos de hasta el 27% en promociones de vivienda nueva en ciudades como Murcia, Orense, Málaga o Valladolid. Sus precios van desde los 280 euros, en el caso de un piso de un dormitorio en Valladolid, con garaje y trastero incluido, a los 1.100 euros por una vivienda de tres habitaciones y 165 metros cuadrados en Calviá (Baleares) con garaje, trastero y piscina. La entidad presidida por Francisco González delega también la gestión de sus inmuebles de renta en pequeñas inmobiliarias. Así sucede en varias promociones con las que cuenta en la zona del Pasillo Verde de Madrid que exigen, además de las condiciones habituales para la firma del contrato, depósitos o avales bancarios.

Altamira, la encargada de comercializar los inmuebles de Santander, ofrece en renta pisos tanto de obra nueva como de segunda mano, en los que exige el mes corriente y el de fianza. En este momento, la sociedad está ofertando alquileres con hasta dos meses de carencia el primer año. Sin embargo, su oferta de venta se centra en la obra nueva con viviendas a partir de 60.000 euros en la Comunidad de Madrid.

Asimismo, Sabadell comercializa sus inmuebles a través de Solvia, que cuenta con una multitud de pisos en venta así como de algunos en régimen de alquiler. En concreto, ofrece viviendas de una, dos, tres y cinco habitaciones en el Barrio de Salamanca de Madrid a partir de 930 euros mensuales. Para poder acceder a ellos es necesario contar con un contrato de trabajo, presentar las tres últimas nóminas, dar un mes de fianza y tres meses de garantía adicional (aval o depósito en efectivo).

Sin descuentos pero con mensualidades gratis es la oferta de Servihabitat, el vehículo de CaixaBank para la venta y alquiler de inmuebles. La plataforma, que alquila determinadas promociones de obra nueva en el centro de Madrid con hasta tres mensualidades gratis, exige un mes de fianza, la renta del mes corriente y el de agencia para la firma del contrato. En cuanto a la venta, Servihabitat ofrece viviendas a partir de 60.000 euros en las cercanías de Barcelona, mientras que en otras provincias como Toledo cuenta con una amplia oferta de viviendas desde 27.000 euros.

Esta semana el Ejecutivo ha actuado de urgencia para solventar el drama de los desahucios y ha aprobado un paquete de actuaciones que incluyen la paralización de nuevos desalojos para las familias más vulnerables, con unos ingresos inferiores a 19.164 euros al año, y con la puesta en marcha de vivienda social para realojar a los ya afectados por embargos, cuyas condiciones se desconocen aún. Hasta ahora, la obra social de las cajas de ahorros era la encargada de paliar la problemática del acceso a la vivienda con programas de casas asequibles. Es el caso de La Caixa, que cuenta con un programa de alquiler solidario que este año ha ofertado pisos con rentas mensuales de entre 80 y 325 euros.

Más información

Archivado En

_
_