Fedea: "Si queremos cumplir el déficit, olvidémonos de revalorizar las pensiones"
El subdirector de Fedea, José Ignacio Conde Ruiz, considera que las posibilidades de que España cumpla el objetivo de déficit del 6,3% del PIB este año son mínimas. Y nulas si el Gobierno opta por revalorizar las pensiones
"Si queremos cumplir el déficit, olvidémonos de revalorizar las pensiones". Esta ha sido una de las ideas que lanzó el representante de Fedea en el congreso anual de la Organización de Inspectores de Hacienda que se celebra en Santander. La misma tesis defiende el Banco de España, que calcula que elevar las pensiones con el IPC de noviembre elevaría el gasto entre 2.500 y 3.000 millones adicionales, una partida que se consolidaría para el ejercicio siguiente.
El Gobierno, de momento, rechaza posicionarse. Todos los partidos políticos de la oposición preguntaron al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, si se compensaría a los pensionistas por el incremento de precios durante el debate sobre los Presupuestos de 2013. Montoro calló, pero los números cantan. El conjunto de la Seguridad Social registrará un déficit de 10.500 millones este año, según la notificación remitida esta semana por el Gobierno a Bruselas.
Conde Ruiz señaló que el recelo de los mercados hacia España se explica por el incumplimiento sistemático de los objetivos de déficit desde que empezó la actual crisis económica y que derrumbó los ingresos públicos. En este sentido, Fedea defiende que el actual sistema fiscal sirvió para los tiempos de la burbuja inmobiliaria pero resulta totalmente inadecuado en la actualidad. A diferencia de otros países, los ingresos tributarios han caído muy por encima del PIB, una circunstancia que muchos analistas explican por el incremento de la economía sumergida.
Sin embargo, Fedea sostiene que la capacidad para recuperar la recaudación a través de la lucha contra el fraude es limitada y propugna una reforma fiscal en profundidad que reduzca los tipos marginales de los principales impuestos y elimine deducciones. Actualmente, España el gravamen máximo del IRPF asciende al 52% y al 56% en algunas comunidades, uno de los niveles más altos de la UE y del mundo. En el impuesto sobre sociedades sucede algo similar. Para Fedea, España debería rebajar los marginales, para incentivar la llegada de capital humano y de inversiones empresariales y suprimir deducciones que "responden a la presión de grupos de intereses". En este sentido, Conde Ruiz auguró que el Ejecutivo eliminará la deducción en el IRPF por reinversión en vivienda con carácter "retroactivo", una medida que permitiría ingresar 5.000 millones adicionales anuales. El Gobierno, de momento, solo ha suprimido este beneficio fiscal para quien compre una casa a partir de 2013, una medida que tiene una capacidad recaudatoria muy limitada en un momento en que el mercado está paralizado. De hecho, si además de la deducción por compra de vivienda habitual con carácter retroactivo se eliminarán otros beneficios fiscales en el IRPF, Fedea calcula que la recaudación aumentaría en 9.200 millones.
"Los ricos de verdad no pagan impuestos"
José Ignacio Conde Ruiz, subdirector de Fedea, entiende que es razonable que los ricos paguen más impuestos, si n embargo, rechaza que ello se logre subiendo el IRPF. "Alguien no es rico por ganar mucho dinero un año concreto, lo es por los bienes que posee", apuntó Conde Ruiz. Precisamente el impuesto sobre el patrimonio grava la riqueza y no el salario, sin embargo, el inspector de Hacienda, Domingo Carbajo, aseguró durante su intervención en el congreso de este colectivo que los ricos de verdad no pagan este tributo. Existen multitud de mecanismos para eludir el pago de este tributo y los inspectores señalaron que la exención por bienes ligados a la empresa familiar supone el principal agujero para sortear el pago de un tributo que ingresan las comunidades y que aportó unos 800 millones este año.