Rehn anuncia que Europa está lista para la petición de un rescate a España
El comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, anunció ayer que Europa está preparada para actuar en cuanto reciba la petición de rescate de España u otro país de la UE. No obstante, Rehn reconoció los esfuerzos de España en el saneamiento de la banca, la reducción del déficit y las reformas estructurales. Guindos, por su parte, celebró que la factura de la intervención financiera se limite a un 4% del PIB.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el ministro de Economía, Luis de Guindos, recibieron ayer al comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios de la Unión Europea, Olli Rehn, para tratar, según detallaron estos dos últimos en rueda de prensa, la crisis europea, su vertiente española, y los pasos necesarios para mitigar ambas. La posibilidad de que el país termine pidiendo un rescate no formaba parte de la agenda oficial, y Rehn aseveró que "no existe tal petición" pero quiso dejar claro que las autoridades comunitarias están "dispuestas y preparadas para actuar" en cuanto España, u otro miembro, lo solicite.
"La zona euro tiene la caja de herramientas para lograr la estabilización de los mercados, que además ha sido reforzada con el anuncio del Banco Central Europeo de su programa de compra de deuda", añadió. En cuanto a las reticencias mostradas por algunos Estados miembros, como es el caso de Alemania, ante este tipo de intervenciones, Rehn lamentó que "se haya convertido en algo habitual que los Estados miembros de la UE hagan declaraciones individuales", pero defendió que no tiene "motivo alguno para dudar de que todos y cada uno de los Estados miembros honrarán los compromiso adquiridos".
Más allá de estas consideraciones, el comisario no quiso especular sobre un escenario de petición de rescate o las posibilidades con que cuenta España para eludirlo. El país, defendió, está ahora centrado en sanear su sector financiero, reducir su déficit y desarrollar las reformas estructurales necesarias para recuperar el crecimiento económico y disminuir las "dramáticas cifras de desempleo". Pilares de trabajo que luego desgranó.
El comisario reconoce los esfuerzos reformistas del Gobierno
En cuanto a la reestructuración de la banca, el comisario adelantó que los fondos europeos podrán inyectarse en diciembre. Las pruebas publicadas el viernes por la consultora Oliver Wyman concluyen que el sistema necesita una recapitalización inferior a los 60.000 millones de euros lo que, según Economía, requerirá 40.000 millones de los fondos europeos. Una cifra, "equivalente al 4% del PIB" y muy por debajo de los 100.000 millones ofrecidos por Bruselas, que el ministro consideró un éxito. Ni él ni el comisario, no obstante, aclararon que ocurrirá con los 60.000 millones restantes disponibles. Rehn asumió que lo normal es que las ayudas a la banca no computen en el déficit estructural que España se ha comprometido a reducir, pero dejó claro que la decisión queda en manos de Eurostat.
Mientras tanto, Guindos admitió que las ayudas ya concedidas por el Estado a entidades como "Bankia, Banco de Valencia o Unnim", elevan en un punto el déficit de este año. Con todo, Rehn valoró la "determinación" y las posibilidades del Ejecutivo a la hora de concluir el año con un déficit del 6,3%.
Finalmente, Rehn se refirió a la agenda de reformas estructurales que viene asumiendo el Gobierno y las que podría imponer Bruselas en caso de que el país solicite un rescate. "Comprendo las dificultades a las que se enfrenta España, pero las recomendaciones de la Comisión Europea son para crear las condiciones de una recuperación económica sólida y retornar a un crecimiento sostenible", sostuvo, argumentando que no tomar estas decisiones, por duras que sean, supondría prolongar la duración y aumentar el impacto de la crisis. En esta línea, el comisario dejó caer que serán necesarias otras reformas. Guindos, por su parte, adujo que el Ejecutivo seguirá adelante con las reformas y evaluará la conveniencia "para España y la eurozona" de solicitar el rescate.
"Hay que garantizar el sistema de pensiones"
La situación de los pensionistas españoles se coló ayer en la agenda del comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, quien sostuvo en su visita a Madrid que para devolver la solvencia a las cuentas públicas del país "inevitablemente hay que garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones". Aunque no entró en mayor grado de detalle, las palabras del comisario inciden en el clima de incertidumbre que rodea la actualización de las pensiones que el Gobierno debería aprobar para compensar la pérdida de poder adquisitivo derivada de la subida del IPC. Su aplicación tendría un coste superior a los 2.500 millones de euros, que el Ejecutivo podría tener que extraer de la llamada "hucha de las pensiones".Más allá del rechazo que pueda generar dicha actuación en Bruselas, las palabras de Rehn son una invitación a acelerar el atraso de la edad de jubilación.
La cifra
1 punto se elevará el déficit español este año, hasta el 7,4%, como consecuencia de las ayudas públicas que el Estado ha inyectado a entidades como Bankia.