¿Es España la más beneficiada de las palabras de Draghi? La respuesta: no
El Gobierno que preside Mariano Rajoy respira aliviado por la menor presión que soporta la deuda española desde que el presidente del BCE, Mario Draghi, anunció el 6 de septiembre su plan de compra de bonos siempre que medie una petición de rescate. Sus palabras, sin embargo, han beneficiado más a países como Francia o Bélgica, que cada vez pagan menos por financiarse a corto.
La deuda española vivió un antes y un después del lunes 3 de septiembre. Entonces, los rumores de mercado de que el BCE iba a lanzar un programa para disminuir la rentabilidad de la deuda de países en problemas (fundamentalmente España e Italia) hizo que se desplomase el bono, que pasó de cotizar de los 550 a menos de 400 en escasos días. La situación en el corto plazo, sin embargo, es distinta. Los más beneficiados de este anuncio, sin embargo, han sido países como Francia o Bélgica, a los que les resulta más barato financiarse. El bono español a tres años cotiza en la actualidad en el 3,68%, después de caer hasta el 3,37% el 7 de septiembre, el día posterior a la rueda de prensa del presidente del banco central, Mario Draghi. Desde entonces, los inversores han perdido un 0,2% de la inversión en deuda pagadera a tres años o menos. Los que hayan invertido en deuda belga al mismo plazo han salido ganando por el contrario.
España también sale perdiendo cuando se observa el coste por asegurar la deuda frente a impagos a través de CDS (credit default swaps, un instrumento derivado). Desde el anuncio de Draghi, el coste para asegurar la deuda francesa a diez años ha caído en el entorno del 13%, frente a una caída del 11% de la alemana. Para asegurar la española, sin embargo, ahora hay que pagar un 10,4% más.
El mercado, en todo caso, parece estar aguardando el momento en que España solicite el rescate de forma definitiva. De hecho, y a no se cuestiona si habrá o no rescate, sino cuándo se solicitará y cuáles serán las condiciones. Los análisis más enrevesados aseguran que el resultado de la subasta de deuda del jueves pasado, en la que se superó el objetivo máximo de colocación, puede dilatar la petición de rescate del Gobierno español. Pero, aunque es cierto que se superó el máximo en el conjunto de la subasta, la colocación en la deuda a 10 años fue mínima: tan solo 859 millones de euros. Las presiones sobre el Gobierno español para que solicite ya el segundo rescate a Europa van en aumento. En este contexto, la prima de riesgo se ha mantenido en 417 puntos. El bono español a 10 años paga el 5,76%, casi al mismo nivel que en la jornada anterior. El bono alemán, por su parte, sitúa su rentabilidad en el 1,59% frente al 1,57% de ayer.