Italia revisa a la baja sus previsiones de crecimiento para 2012 y 2013
El Gobierno italiano revisó hoy a la baja sus previsiones de crecimiento y estimó una contracción del 2,4% del PIB para 2012 y del 0,2% para 2013.
Así consta en la actualización del Documento de Economía y Finanzas (DEF) aprobada este jueves en Consejo de Ministros y que refleja, según el Ejecutivo, el empeoramiento registrado en el escenario macroeconómico como consecuencia del agravamiento de las tensiones sobre los mercados de la deuda soberana y por la incertidumbre que ha caracterizado en los últimos meses a la zona euro.
Según estas nuevas estimaciones, el Producto Interior Bruto (PIB) italiano se contraerá un 2,4% en 2012 y de un 0,2% en 2013, frente a la caída de un 1,2% que había estimado el Ejecutivo para este año en sus previsiones de abril y de un ligero crecimiento del 0,5% para el año próximo.
Sin embargo, el Gobierno pronostica una inversión de la tendencia a partir de 2014, cuando estima que Italia tendrá un crecimiento del 1,1%, que se consolidará en 2015 con un avance del 1,3%.
El Ejecutivo atribuyó este giro positivo a una mejora de la demanda mundial y al resultado de las medidas económicas adoptadas por el Gobierno, entre las que figuran una reforma laboral, un paquete de liberalizaciones en diferentes sectores y un programa de simplificación de la burocracia, destinados a promover el crecimiento.
En cuanto al déficit, el Gobierno elevó en casi un punto porcentual sus previsiones y estimó que en 2012 se situará en el 2,6%, frente al 1,7% que pronosticó en abril.
Una circunstancia que atribuyó a una evolución menos favorable de lo previsto en las entradas y al mayor coste que ha tenido que asumir el país para financiarse, debido a las crecientes tensiones registradas en los últimos meses en el mercado de la deuda soberana.
Para 2013, las previsiones de déficit nominal lo situaron en un 1,6%, con lo que este dato también fue peor a las estimaciones de abril, cuando se pronosticó que se situaría en un 0,5%.
Con todo, el Ejecutivo señaló que para 2012 se prevé un déficit estructural del 0,9 % y subrayó que esto supone una reducción de 2,8 puntos porcentuales con respecto a 2011, mientras que para 2013 mantuvo su objetivo de alcanzar el equilibrio presupuestario en términos estructurales.
Estimó un superávit estructural del 0,2% para 2013 y subrayó que, de este modo, confirma dicho objetivo de equilibrio de cuentas a pesar de impactos adversos como los terremotos que sacudieron la región de Emilia Romagna el pasado mayo, y pese a una ralentización de la economía, mayor a la prevista en las estimaciones presentadas en abril.
Unas circunstancias que, destacó el Ejecutivo, han obligado a asumir gastos que no pueden ser reducidos.
En esta línea, en una comparecencia ante la prensa posterior a la publicación de estos nuevos datos, el primer ministro italiano, Mario Monti, insistió en que el saneamiento de las cuentas públicas y el objetivo de equilibrio presupuestario para 2013 sigue siendo su objetivo prioritario.
"La luz de la recuperación ya se divisa. El año próximo será un año de recuperación", agregó el mandatario, quien subrayó la importancia de que Italia siga el camino emprendido para el saneamiento de sus cuentas, ya que, en caso contrario, "no solo los mercados darían señales negativas, sino que para el país sería cada vez más difícil ejercer su influencia" en Europa.
Italia, la tercera economía de la zona euro y que cerró 2011 con una deuda pública del 120,1% de su PIB, estimó que el endeudamiento del Estado será del 123,3% en 2012.
Para 2013, el Ejecutivo prevé una reducción hasta el 122,3%, en función de una recuperación de la actividad económica y del programa de venta de inmuebles y acciones patrimonio del Estado que ha acometido el Gobierno y cuyos ingresos cifra en cerca de un punto porcentual del PIB anual.
Para 2014, los pronósticos establecen que el endeudamiento del Estado siga su tendencia a la baja y se sitúe en un 119,3% y en un 116,1% en 2015.