El BCE calcula que la deuda de España puede llegar al 100% si falla el ajuste
El Banco Central Europeo calcula que la deuda pública de España superará la barrera del 100% de su producto interior bruto (PIB) si no consigue completar el plan de ajuste estructural anunciado para devolver la sostenibilidad a sus cuentas y reducir el déficit por debajo del 3% que impone Bruselas. Según afirma el organismo que preside Mario Draghi en su boletín de septiembre, en el peor de los escenarios previstos el pasivo del Estado podría subir hasta alcanzar el 104% del PIB en 2016. Este repunte supondría multiplicar por tres los niveles previos a la crisis, cuando se situaba sobre el 35%, y aumentaría el abanico de argumentos que manejan los inversores para dudar de las finanzas públicas españolas.
El BCE establece tres escenarios posibles para España: el primero está realizado en función de la evolución económica; el segundo depende de los cambios en los tipos de interés y, el tercero, en el que el Gobierno incumpliría los planes de ajustes comprometidos ante sus socios del euro. Este último caso es, en opinión del instituto emisor, el más negativo, ya que impediría reducir el déficit y, por tanto, es el que peor consecuencias tendría para la deuda pública española, que seguiría subiendo en los próximos cuatro años.
"Según este escenario, la deuda en relación con el PIB alcanzará un máximo del 104% en 2016 y disminuirá, posteriormente, hasta el 103% en 2020", afirma el BCE. La razón que explica el salto entre el nivel del 68,5% con el que cerró 2011 al 106% está, en un principio, en el crédito de hasta 100.000 millones del rescate a la banca y, a partir de ahí, en que la falta de éxito en las reformas haría imposible recuperar un saldo positivo entre los ingresos y los gastos del Estado.
Esta recuperación de la sostenibilidad presupuestaria es una condición ineludible para destinar recursos a rebajar el pasivo y que obliga a seguir endeudándose.
MEdidas a corto
A modo de conclusión, el BCE insiste en que alcanzar el equilibrio presupuestario es imprescindible para lograr que la deuda retome su senda de moderación. En caso de no lograrlo, el BCE llega a pedir de nuevo medidas ambiciosas a corto plazo.