Ojo a octubre: vencimientos millonarios con el rescate a la vuelta de la esquina
El BCE ha inyectado optimismo, pero la realidad se impone. España debe afrontar en octubre vencimientos de deuda que rozan los 30.000 millones de euros y que pueden dinamitar cualquier esperanza de superar la crisis en solitario.
Un otoño complicado. Esa es la máxima de los analistas para definir el devenir del mercado y de la eurozona en los próximos meses. Dentro de ese escenario de turbulencias, Italia y España ocupan un papel destacado. Sin embargo, las nuevas medidas anunciadas por Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE) parecen arrojar algo de optimismo y así lo ha reflejado el comportamiento de la deuda. Después de que el supervisor comunicará su decisión de comprar bonos de manera ilimitada una vez que los países soliciten el rescate, la prima de riesgo ha caído a niveles que no veían desde abril. En concreto, el diferencial entre el bund alemán y el bono español a diez años se aproxima a los 400 puntos.
El mercado tomó la noticia con alegría aunque todavía no se ha adoptado ninguna medida concreta. La responsabilidad está ahora en manos de los Gobiernos y, según apuntó la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, tras el Consejo de Ministros del pasado viernes, el Ejecutivo español estudiará con calma las condiciones antes de tomar cualquier decisión. El mercado da por descontado que España acabará claudicando y pedirá el rescate que abriría las puertas a la intervención del BCE. El problema se halla en el que tiempo habrá que esperar para que Rajoy pida la ayuda a Bruselas.
Pero mientras el resto de la zona euro fija su mirada en los países del Sur del Europa, el reloj de los vencimientos sigue su curso y octubre es un mes marcado en el calendario. En concreto y según los datos que proporciona el Tesoro, en el décimo mes del año España tendrá que hacer frente a 29.116 millones de euros de vencimientos, la cantidad más elevada de todo 2012, por delante incluso de abril y julio. En el mismo periodo de 2011 la cifra se situaba en los 23.000 millones de euros. De los 29.116 millones de euros, 8.891 corresponden a letras y los 20.226 millones restantes a bonos.
Hasta la fecha, y contando el mes de septiembre, España ha hecho frente al 72% de los vencimientos previsto para el conjunto del año. Según la información contenida en la web del Tesoro en 2012 se prevén unos vencimientos de 151.000 millones de euros, y antes de octubre la cantidad cubierta asciende a 109.000 millones.
Asimismo, el erario público ha emitido hasta la fecha 117.838 millones de euros, es decir, algo más del 63% de lo estimado para el conjunto del 2012 (186.100 millones de euros).
Antes de que el BCE anunciara las nuevas medidas dadas a conocer la semana pasada, España conseguía colocar cerca del máximo pero a tipos muy elevados. Los rumores que comenzaron a circular sobre la intervención del regulador en el mercado secundario antes de su reunión mensual permitieron tomarse un respiro y horas antes el Tesoro vendió bonos a dos, tres y cuatro años un punto porcentual inferior a lo que venía acostumbrando. Pero esto no supone un alto en el camino a los elevados intereses de la deuda española que todavía continúa registrando cotas que hacen insostenible la financiación y que supondrán un incremento significativo en la partida presupuestaria. Ya a comienzos de año el Ministro de Hacienda y Administraciones Públicas cifraba en 28.848 millones la cantidad destina al pago de dichos intereses.
Habrá que esperar a ver si el Ejecutivo opta por la petición de rescate, algo que permitiría que las rentabilidades de los bonos cayeran de manera significativa. De momento, las impopulares medidas adoptadas por el Gobierno parece que no están dando sus frutos. Ni el rescate bancario ni la tercera reforma del sistema financiero desde que el PP llegara al poder han disipado las dudas que se ciernen sobre la economía española.