Telefónica, motor de empresas
Una de las peores consecuencias de esta eterna crisis económica es el drama del paro. Pero conviene no olvidar que tiene su origen en la falta de inversión y esta, a su vez, en una sequía de crédito que amenaza con abortar cualquier iniciativa empresarial, por innovadora y valiosa que pueda llegar a ser. Esa es la razón por la que todo proyecto encaminado a impulsar la creación de empresas debe ser acogido con el máximo apoyo, y más si se orienta a la innovación y las tecnologías de futuro, que al final es donde van a estar los yacimientos de empleo cuando acabe esta crisis. La red internacional de fondos de capital riesgo Amérigo, que ha lanzado Telefónica con un capital comprometido de 300 millones de euros, es un importante paso en esa línea, no solo por lo que significa en sí mismo sino por lo que tiene de foco a seguir por otras grandes compañías. Orientado a identificar y financiar empresas innovadoras de alto impacto en el mundo digital, cuenta con la adhesión de los Gobiernos de España, Colombia, Chile y Brasil y el compromiso de inversión de otros agentes financieros centrados en el sector tecnológico. Todo ello, unido a la potencia internacional de Telefónica -que aumenta así el desarrollo de nuevos proyectos- abre un mundo de extraordinarias expectativas que, al final, serán generadoras de empleo.