Florentino Pérez achaca a Iberdrola los primeros resultados negativos de ACS
ACS ha sufrido unas pérdidas de 1.200 millones derivadas de la inversión en Iberdrola. La sociedad ha decidido sanear el valor de esta participación, con un coste de unos 2.500 milllones de euros. El beneficio en términos comparables cae el 16,7%, hasta 380 millones. El presidente del grupo, Florentino Pérez, ha justificado el varapalo por el ajuste del test de deterioro y las provisiones por la participación en Iberdrola
"Por su singularidad me he permitido presentar personalmente estos resultados, negativos por primera vez en nuestra historia". De este modo ha abierto Florentino Pérez el acto de presentación de resultados del primer semestre de ACS ante los analistas. El presidente ha justificado el varapalo sufrido por su compañía por el ajuste del test de deterioro y las provisiones por la participación en Iberdrola. ACS presenta unas pérdidas de 1.233 millones, frente a los 604 millones en positivo declarados hace un año.
El intento de toma de control de Iberdrola ha salido caro a ACS, que ha decidido sanear su exposición a la eléctrica en este semestre. En total, ACS ha asumido unos costes de 2.500 millones de euros antes de impuestos por distintos conceptos de su inversión en la eléctrica.
El beneficio neto recurrente también ha evolucionado a la baja, marcando 430 millones, con un 15% menos que el resultado de hace un año. En este contexto de caída, el grupo de infraestructuras destaca su récord en ventas (18.833 millones), Ebitda (1.578 millones) y cartera (70.562 millones) conseguido en un semestre. "Somos el primer grupo de infraestructuras del mundo", recuerda Pérez. El primer ejecutivo de ACS también ha resaltado el ejercicio de reducción de deuda en el periodo en cerca de 2.000 millones, situándose la deuda neta en 8.579 millones.
Fuera del impacto de Iberdrola, ACS ha mostrado un fuerte crecimiento tanto en ventas (+70%, hasta 18.000 millones de euros) como en beneficio de explotación debido a la incorporación de Hochtief. El Ebitda creció el 80% y el Ebit el 51%, hasta 831 millones. Sin tener en cuenta a Hochtief, explica ACS, el aumento de los ingresos habría sido del 6%.
Las minusvalías derivadas de la inversión en Iberdrola obedecen a tres conceptos diferentes, según cuenta ACS en la nota a la CNMV. Primero, 856 millones corresponden a la venta del paquete del 3,69% de la eléctrica, colocado a un precio inferior al de adquisición. Otros 1.375 millones corresponden a la valoración a precio de mercado del resto de la participación, y otros 366 a los costes de los procesos de refinanciación vinculados a esta operación.
El impacto final de cada una de estas partidas queda reducido por los impuestos, y ACS se ha apuntado extraordinarios por 200 millones derivados de la venta de Abertis. De este modo, explica la empresa, eliminando todos los resultados extraordinarios y la aportación de Hochtief, el resultado final en términos comparables ha sudo de 380 millones de euros, un 16,7% menos que el año pasado.
La deuda de la empresa ha caído un 12,7%, hasta los 8.579 millones, a pesar del aumento de los pasivos relacionados con Hochtief. Los gastos financieros suponen 720 millones de euros. La incorporación de la empresa alemana ha permitido, además, reducir de forma exponencial la dependencia del negocio español. El el primer semestre de 2011 las ventas en España eran el 47,5% del total, y este año son el 18,7%.