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Columna
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Dosis de realidad en las grandes mineras

Los resultados decepcionantes de la brasileña Vale y la domiciliada en Reino Unido Anglo American deberían disipar cualquier duda sobre si las mineras más grandes del mundo han entrado en un periodo de difícil retorno. Ambas produjeron grandes cantidades de materia prima en el segundo trimestre. Sin embargo, la rentabilidad subyacente está cayendo drásticamente. Incluso si la demanda se recupera a finales de este año, los costes y los recursos nacionales aumentarán persistentemente. Después de una década en auge, regresar a la normalidad va a ser doloroso.

El año pasado, Vale obtuvo casi 52 centavos de beneficio de explotación por cada dólar de facturación en el segundo trimestre. El 33% de margen de explotación de Anglo fue el mismo que el de Google. Las caídas de dos dígitos -un 36% de Vale en el segundo trimestre y un 23% de Anglo en la primera mitad- muestran que la atroz rentabilidad de los mineros está menguando. Después de décadas de inversión insuficiente, la oferta está creciendo lentamente para satisfacer la demanda.

La débil demanda china, que contribuyó a bajar los precios en la primera mitad, podría animarse al final de este año si Pekín registra un crecimiento más agresivo o los bancos centrales de Occidente comienzan a imprimir dinero. Pero incluso si los precios suben, la rentabilidad puede no mejorar. La industria está falta de mano de obra y equipos. Las huelgas siguen siendo un problema, especialmente para Anglo. Los inversores acusaron la caída de más del 4% en sus acciones como reacción a un retraso en su buque brasileño de mineral de hierro.

En última instancia, los mineros deberían evitar regresar a los oscuros días de los noventa, cuando la industria luchó por recuperar sus costes. Y las compañías están haciendo lo que pueden por calmar a los inversores. Anglo elevó su dividendo un 14% y recortó de nuevo su plan de gastos de 2012 en más de una quinta parte. Vale solo podía ofrecer palabras tranquilizadoras sobre "maximizar la creación de valor", mientras espera a que bajen los precios del mineral de hierro para forzar a las minas chinas a cerrar. Y para el resto del sector, ambos les han hecho un servicio bajando las expectativas.

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