"La disciplina, básica en el deporte, se puede extrapolar al trabajo"
Álex Fábregas tiene tan solo 31 años, pero cuenta en sus espaldas ya con una gran trayectoria profesional. Nacido en Barcelona, es jugador del equipo de hockey sobre hierba que representará a España en los Juegos Olímpicos de Londres. Estos son ya sus terceros: participó en Atenas 2004, donde obtuvo el cuarto puesto; en Pekín 2008 se llevó la medalla de plata. Actualmente, es jugador y capitán del Real Club de Polo de Barcelona, con el que ha ganado tres Ligas nacionales (2002, 2003 y 2008), dos Copas del Rey (2002 y 2008) y una Copa de Europa (2004).
Además, ha sido nominado como mejor jugador del mundo sub-23 (2003) y mejor jugador de la Copa del Rey (2004). Sin embargo, sus éxitos no acaban en el mundo del deporte. Estudió Administración y Dirección de Empresas y en 2006, nada más graduarse, entró a formar parte de la consultora BDO, donde es auditor sénior y donde trabaja para clientes del sector servicios y tecnológico.
¿Cómo logra compaginar el deporte profesional y su carrera como auditor?
Todo empezó hace muchos años. La Federación de Hockey realizó un acuerdo con BDO en el que, además de existir una compensación económica por el patrocinio de la marca, ofrecían facilidades a aquellos deportistas que habían estudiado Económicas, Derecho o carreras similares. Este acuerdo se firmó en 2003 y yo entré en BDO en 2006. El patrocinio se acabó en 2008, pero, aun así, siguieron manteniéndonos las mismas condiciones. Al ser auditor, voy cambiando de cliente y si una semana me toca estar fuera de la oficina, el trabajo lo realiza un compañero mío.
¿En qué consiste ser un deportista de élite?
Supone muchas horas de entrenamiento y de viajes. Estás siempre con el deporte en la cabeza, prestando atención a tu forma física y cuidándote los 356 días del año. Pero, al final, la recompensa llega. Estos son mis terceros Juegos, pero con solo haber vivido unos ya merece la pena todo el esfuerzo que he realizado. También es cierto que he tenido suerte. Supongo que si vas perdiendo los partidos se hace más duro. He tenido la fortuna de contar con unos compañeros muy buenos e ir obteniendo logros con el equipo.
¿Qué rasgos tienen en común un deportista y un auditor?
El deporte forja tu carácter y ayuda en el mundo laboral y en el resto de las facetas de tu vida. La disciplina es una característica básica de cualquier deportista que se puede extrapolar al trabajo, al igual que el orden y la competitividad. Soy ambicioso en ambas facetas. Es algo fundamental para escalar y lograr un mejor puesto. Otra característica común es el trabajo en equipo. Cuando vamos a auditar a un cliente, acudimos varios compañeros. En la empresa, tanto júniors como séniors nos ayudamos y damos apoyo.
¿Cree que competir en los Juegos le hace ser mejor profesional?
Sí, para llegar a las Olimpiadas es necesaria una disciplina muy dura y una competitividad máxima, no solo en los meses antes de que se celebre la competición, sino durante los cuatro años anteriores. Esto te obliga a ser más responsable y a tener un nivel de exigencia máximo.
En la vida y en el deporte no siempre se gana, ¿cómo se afronta la derrota?
Es duro. Hay momentos en que mandarías todo al traste, en que lo abandonarías. Pero después, piensas en todo lo bueno que te aporta, en que te gusta, es tu pasión y, al final, lo positivo se impone siempre.
¿Qué espera la selección española de hockey sobre hierba de los Juegos?
Tenemos muchas esperanzas puestas en los Juegos Olímpicos. Es cierto que ha aumentado mucho la competitividad y los equipos están más preparados y son más profesionales. Pero nosotros también nos hemos entrenado a fondo. Tenemos un equipo con mucha experiencia. Va a ser complicado, pero lo afrontamos con ilusión y creemos que es posible lograr una medalla.
¿Cree que los deportistas españoles son la mejor marca de España en el exterior?
Actualmente, sí. Desde fuera tratan de ensuciar nuestra imagen, probablemente por envidia, pero tenemos a gente muy válida. El fútbol, el baloncesto, el tenis, los deportes en equipo están arriba del todo. Sin embargo, aún tenemos pendiente la asignatura de los deportes individuales.
Una vez concluya su carrera como deportista de élite, ¿se va a centrar en la auditoría o va a intentar seguir compaginando ambos mundos?
Al retirarme tengo claro que voy a estar un año completo de desconexión. El deporte te absorbe mucho y necesitas tiempo para rehacerte, para saborear otras cosas de la vida. Han sido muchos veranos y muchas fiestas de Navidad centrado solo en esto. Así que, de momento, no tengo planeado seguir con él después, me centraré únicamente en mi labor profesional como auditor.