LA subasta de ayer
IMPORTE AL MÁXIMO
El Tesoro emitió 2.981millones de euros ayer en bonos a dos, cinco y siete años, casi elmáximo previsto, establecido entre los 2.000 y los 3.000 millones de euros, pero a tipos desorbitados y con una demanda menguante. Dos síntomas de debilidad que los expertos achacan a las dudas sobre la efectividad de los planes de ajuste del Gobierno y la ausencia de inversores extranjeros.
ALZA EN LOS TIPOS El Estado tuvo que ofrecer un tipo medio del 6,7% para emitir deuda a siete años, lo que le llevó a pagar para un plazo más corto precios que hace poco se exigían para el 10 años. El marginal quedó en el 6,798% y fue el más alto desde 1997 cuando pagó el 6,92% por emitir a 10 años. En el plazo a cinco años pagó un tipo medio del 6,4% y un marginal del 6,543%, también el más alto desde 1997, mientras que a dos años tuvo que pagar el 5,32% de media y un tipo marginal del 5,302%.
CAÍDA EN LA DEMANDA
La demanda fue la gran decepción en la subasta de ayer. En total, las peticiones alcanzaron los 6.409,6 millones pero fueron muy inferiores a las de las subastas recientes. Los ratios de cobertura fueron de 1,9 veces para el dos años (frente al 4,26 anterior), de 2,06 veces para el cinco años (frente al 3,44 anterior) y del 2,91 a siete años (frente al 3,27 anterior).
EL IBEX SUBE EL 0,63%
Las dudas provocadas por la subasta provocaron que la prima de riesgo escalara ayer hasta los 579 puntos básicos, cerca del máximo intradía de 588 puntos básicos, pero la Bolsa logró acabar en positivo. Sumó el 0,63% a la espera del sí alemán al rescate bancario, confirmado finalmente, y con la esperanza de que España pueda usar lo que sobre del plan de ayudas para comprar deuda en el mercado primario. En el resto de Europa las ganancias también se impusieron gracias al tirón del sector tecnológico, con resultados mejores de lo esperado.