El Tesoro emite 2.980 millones y paga el 6,7% a siete años
El Tesoro ha vuelto a mostrar que tiene acceso a la financiación del mercado pero a un precio desorbitado. En la subasta de hoy ha emitido 2.980 millones de euros en deuda a dos, cinco y siete años, casi el máximo previsto, pero se ha visto obligado a pagar tipos medios entre el 5,2% y el 6,7%, muy superiores a los de las anteriores emisiones y los más altos desde el euro. La demanda total se resiente significativamente pese a superar los 6.400 millones.
La historia se repite. El Tesoro afrontaba hoy otra cita clave en un momento de máxima tensión con la prima de riesgo en niveles récord. El desafío, de nuevo, resultaba mayúsculo pero una vez más el Estado logró captar financiación del mercado. Emitió 2.980 millones en bonos a dos, cinco y siete años, lo que le permitió alcanzar casi el máximo fijado para la subasta, establecido entre los 2.000 y los 3.000 millones. Eso sí a un precio desorbitado. Tuvo que pagar tipos medios del 5,2%, 6,4% y 6,7% para emitir deuda a dos, cinco y siete años respectivamente. El otro síntoma de creciente debilidad lo dio la demanda. El ratio de cobertura total alcanzó las 2,15 veces, las peticiones superaron los 6.400 millones, pero cayeron significativamente respecto a emisiones anteriores.
La pelea del Estado por tratar de reducir los costes de emisión se ha convertido en algo titánico. La desconfianza hacia España no remite. El plan de rescate a la banca, el mayor plazo concedido por Europa para reducir el déficit y la última batería de recortes aprobada por el Gobierno no han logrado el efecto deseado a la hora de relajar la tensión en el mercado de deuda. El pasado martes el Tesoro consiguió rebajar el interés de la emisión de letras respecto a las subastas anteriores de junio pero hoy no ha logrado repetir la hazaña. Bajar los costes en los plazos más largo se complica y hoy se ha visto que para emitir a cinco o diez años el mercado pide más del 6,4%, un nivel que hace poco era lo que exigía por emitir deuda a diez años.
El fuerte incremento de costes ha llevado al Tesoro a concentrar la adjudicación de hoy en el plazo más corto. En concreto emitió 1.360 millones en bonos con vencimiento 2014 (algo más de dos años). A cinco años (vencimiento octubre de 2017) colocó 1.074 millones mientras que en la referencia más larga, el siete años (vencimiento octubre 2019) adjudicó 548 millones de euros.
La demanda en los tres tramos superó la oferta pero se resintió sustancialmente respecto a las subastas anteriores. El ratio de cobertura en el bono a dos años alcanzó 1,9 veces frente a las 4,26 de la subasta de junio. En el plazo a cinco años las peticiones superaron en 2,06 veces la oferta, una caída también importante respecto a las 3,44 veces de la subasta anterior de junio. El descenso de demanda en la subasta a siete años también fue significativo donde el ratio de cobertura quedó en 2,91 veces frente a las 3,27 de la subasta anterior de febrero.
La peor noticia, sin embargo, llegó por el incremento de los costes de financiación. El Tesoro pagó un tipo medio del 5,204% por deuda a dos años frente al 4,335% de junio. Tuvo que desembolsar el 6,459% a cinco años frente al tipo medio del 6,072% que pagó en junio, mientras que el mayor incremento se dio a siete años, plazo para el que el mercado exigió un tipo medio del 6,701% frente al 4,832% que pagó en febrero la última vez que emitió esta referencia exacta.
Los precios que pagó el Tesoro estuvieron en línea con lo que exigía el mercado justo antes de la subasta pero resultaron los más altos desde la llegada del euro. A dos años el marginal quedó en el 5,302% y hay que remontarse al año 2000 para ver un tipo superior a ese nivel. Entonces por deuda a tres años, no del todo comparable, el Tesoro llegó a pagar el 5,42%. En el resto de referencias la lectura es similar. El marginal a cinco años quedó ayer en el 6,543% y hay que remontarse a 1997 para ver un interés similar por emitir a este plazo. En cuanto al siete años, pese a que no existen referencias exactas para comparar, el marginal pagado hoy, del 6,798%, es el más alto desde 1997, año en el que el Tesoro llegó a pagar el 6,92% por emitir a diez años.
La prima de riesgo rondaba los 573 puntos básicos antes de la subasta y justo después repuntó por encima de 580, lo que situó el bono a 10 años por encima del 7%.