Heineken debe conservar APB
Los holandeses fueron expulsados de las Indias Orientales hace 60 años por los ingleses, japoneses y javaneses. Así que la principal cervecera del país, Heineken, está lógicamente preocupada al ver amenazado su lugar en la región por el multimillonario de Bangkok Charoen Sirivadhanabhakdiv.
El magnate de la Thai Bev compite por adquirir una participación no solo en Asia Pacific Breweries, empresa asociada a Heineken en la región, sino en la empresa matriz, Fraser and Neave, que trabaja con Heineken desde 1931, cuando los holandeses todavía dominaban un amplio espacio del sudeste de Asia. Thai Bev hizo una oferta por las partes que posee en las dos compañías el banco de Singapur OCBC y un afiliado.
Perder el control sobre APB no sería solo una pérdida de prestigio colonial para el grupo con sede en Ámsterdam. Asia es clave en el crecimiento de Heineken. En el primer trimestre la compañía vio crecer las ventas en Asia-Pacifico un 8,4%, aproximadamente, el doble que en América y mucho mejor que el 2% de caída que ha tenido en el mercado de Europa occidental.
Además, el acuerdo con APB, con la que también colabora la cerveza Tiger, ha adquirido más importancia por los fracasados esfuerzos de Heineken en China, quedando relegada a la importación de sus botellas verdes. Si bien es más lucrativo que elaborar cerveza local, no logró llegar al nivel que han conseguido sus rivales AB-Inbv y SAB en el mayor mercado mundial de cerveza por volumen. Puede que el equilibrio se mantenga. OCBC no ha dicho si va a vender sus participaciones. Pero es difícil ver por qué el banco no debería tratar de maximizar lo que son unos activos no estratégicos por más valor a diferentes propietarios. Eso es verdad en una era en la que los bancos deben mantener capital.
Pero el episodio ha puesto de relieve la fragilidad de Heineken en Asia. Con una participación del 42% en APB, los inversores pueden necesitar prepararse para la posibilidad de que Heineken un día necesite pagar los 5.000 millones de dólares requeridos para tener el control total.
Por Rob Cox