Intel invierte 3.300 millones en la compra del 15% de ASML
Intel, el mayor fabricante de semiconductores del mundo, ha puesto encima de la mesa 4.100 millones de dólares (3.300 millones de euros) para tomar una participación de hasta el 15% de la holandesa ASML, cuyas acciones subieron ayer hasta un 11% en Ámsterdam. El gigante estadounidense busca con este movimiento recortar en dos años el proceso de introducción de nuevas tecnologías en la producción de chips.
Según detalló Intel, en una primera fase, destinará 829 millones de euros a financiar programas de I+D desarrollados por ASML. Además, invertirá 1.700 millones en la adquisición de una participación del 10% en la compañía holandesa y se compromete a la compra de un paquete accionarial adicional equivalente a otro 5% de ASML por 838 millones de euros. Intel alcanzaría así una participación del 15% en la empresa europea en el tercer trimestre de este ejercicio.
"Estamos muy animados porque Intel se haya comprometido a realizar estas inversiones, que beneficiarán a todos los fabricantes de microprocesadores", dijo el consejero delegado de ASML, Eric Meurice, que admitió que para acelerar sus desarrollos necesitan llevar a cabo fuertes inversiones, y la entrada del gigante estadounidense se lo permitirá.
ASML fabrica circuitos en obleas de silicio de 450 milímetros de diámetro, frente al estándar actual de 300 milímetros, un cambio que permitirá a los fabricantes producir chips más rápido y a un coste inferior. Según distintas fuentes, esta tecnología, junto con la de litografía ultravioles, ayudará a Intel a reducir en un 40% el coste de producción de cada chip.
Los principales clientes de ASML son Intel y Samsung. Por ello, la noticia ha desatado comentarios sobre que la inversión de Intel en ASML podría suponer una amenaza para la surcoreana, pero, según Bloomberg la firma holandesa también está en conversaciones con Samsung y con Taiwan Semiconductor Manufacturing para vender otro 10% de sus acciones. Según ASML, las máquinas que utilizan su tecnología de 450 milímetros estarán listas para 2018, y serán entre tres y cuatro veces más caras que las actuales, lo que podría provocar una consolidación en la industria de los chips.