Freudenberg dedica 40 millones a hacer textiles industriales en Barcelona
La empresa alemana Freudenberg, fabricante de las fregonas Vileda, ha invertido 40 millones de euros en modificar la producción textil de Parets del Vallès y orientarla a aplicaciones industriales. De este modo, exporta el 90% de la producción de tela que fabrica a todo el mundo.
Freudenberg ha dedicado 40 millones de euros a sus plantas de Parets del Vallès para sacar de las instalaciones la producción general de textil y orientarlas hacia productos de valor añadido, dedicados a las aplicaciones industriales. "La confección textil mundial es cada vez menos europea y más asiática. El grupo detectó esto pero, en lugar de deslocalizar las plantas españolas, sacó la producción textil y trajo la de tejidos industriales y tela sin tejer", cuenta Jaume Cané, consejero delegado de Freudenberg en España a CincoDías. Las plantas españolas atrajeron la fabricación de textiles industriales que se llevaba a cabo en Alemania.
El grupo, presente en la Península desde el año 1968, cuenta con una plantilla de unas 700 personas y cuatro plantas productivas con una superficie de más de 60.000 metros cuadrados ubicadas en Parets del Vallès, en la provincia de Barcelona. La multinacional es especialmente conocida por ser los fabricantes de los productos de limpieza Vileda, que si bien no son tan representativos a nivel mundial, en España suponen un 40% de la facturación de la filial. El grupo fabrica en estas plantas, además de los artículos Vileda, productos para diferentes sectores de la industria española, como automoción, industria química y de energía, médica y farmacéutica, textil, mecánica e ingeniería de plantas, así como el sector de la distribución.
Facturación en España
En España, han alcanzado en 2011 unos ingresos de unos 200 millones de euros, una cifra similar a la de 2010, gracias al "aumento de las exportaciones", ya que el mercado nacional ha registrado una "importante caída", detalla Cané. "En general, el consumo nacional cae alrededor de un 8%. Nuestras caídas en productos de consumo son menores pero la marca blanca hace daño", asume el consejero.
A nivel mundial, el grupo factura unos 6.000 millones de euros con presencia en 58 países. "Cada vez exportamos más", señala Cané. El año pasado, la filial española exportó productos por valor de más de 70 millones de euros. "La exportación crecerá al menos un 10% este año, compensando las caídas de ventas en el mercado nacional", aseguró Cané. El consejero espera mantener los números de 2011 durante este año, pese a la caída del consumo.
Para este año, la compañía espera crecer en España en la división de componentes para automoción. "Exportamos el 80% de nuestra fabricación de este tipo de productos", detalla Cané. Además, piensan reforzar su mercado orientado a la energía y abrir a la exportación desde España mercados como Marruecos y norte de África.
Cables submarinos y abrefáciles de quesitos
Las telas industriales o sin tejer que fabrica Freudenberg en España, son un lienzo que surge como resultado de unir una serie de fibras a base de calor u otros procesos mecánicos o químicos. Tienen múltiples aplicaciones, desde la tira que sirve para abrir un quesito envuelto en una funda de cera hasta el recubrimiento de cables subacuáticos, como los usados en la conexión energética entre la península de Italia o Cerdeña, entre Australia y Tasmania o entre España y Marruecos a través del estrecho de Gibraltar. Las líneas de negocio relacionadas con la generación de energía a partir de fuentes renovables constituye una de las principales áreas de crecimiento de Freudenberg. Los productos se están aplicando en grandes proyectos en alta mar, como la instalación eólica London Array, frente a la costa de Gran Bretaña.