Más de 4.000 millones invertidos en espectro
Telefónica ha vuelto a subir la apuesta en Brasil. La operadora se llevó el lote principal de frecuencias en la subasta de espectro, destinado a extender el 4G en el país sudamericano, realizada por el regulador Anatel el pasado martes. La compañía va a invertir en torno a 408 millones de euros en estas bandas del espectro, con la intención de empezar a desplegar el LTE para que ya en 2013 haya cobertura y servicios en las ciudades que van a acoger partidos de la Copa Confederación de Fútbol. En el año 2014, las ciudades sede del Mundial de Fútbol deberán tener cobertura con 4G.
Pero la actividad de Telefónica en este ámbito ha sido casi frenética durante los últimos dos años. La operadora española ha destinado, desde 2010, más de 4.300 millones de euros a la adquisición de espectro en los distintos países.
Así, en 2010, Telefónica destinó 1.237 millones de euros en espectro en Alemania, el mayor mercado de Europa, destinado en este caso al despliegue del 4G con la citada tecnología LTE. En esta misma línea, la compañía invirtió en 2011 un total de 842 millones en la subasta de espectro realizada en España, también destinado al LTE.
No quedará ahí este avance porque países donde Telefónica tiene presencia como Reino Unido, Irlanda, Argentina o Chile, entre otros, también preparan sus subastas de espectro para los próximos meses.
Más inversión
Pero, además, Telefónica pagó en 2010 cerca de 1.237 millones de euros en adquirir frecuencias en México. En este caso, la intención de la compañía pasaba por mejorar la cobertura en 3G para mejorar la oferta de banda ancha móvil. Costa Rica, Colombia y Brasil fueron otros países donde la operadora amplió su espectro a través de la adquisición de nuevas frecuencias durante estos dos últimos años, también con el objetivo de ampliar la cobertura de 3G.
Sin duda, la inversión realizada por Telefónica en este ámbito (y por otros rivales como Vodafone, Deutsche Telekom, France Télécom y América Móvil, entre otras operadoras) es multimillonaria pero, tal y como coinciden los expertos, el espectro es una de las bases del negocio en la telefonía móvil. Y más en un momento como el actual donde la demanda de servicios por parte de los usuarios es cada vez mayor y hay que ampliar la capacidad de la red.
Y es que, sin espectro, no hay opción de desplegar las nuevas tecnologías, tanto de 3G como la nueva de 4G, a su vez claves para el desarrollo del internet móvil. Un negocio de crecimiento decisivo para las operadoras en un momento en el que actividades tradicionales como la voz o los SMS están en retroceso.