La apelación de la banca italiana al BCE bate récords
El conjunto del sector solicitó en mayo 272.700 millones de euros, aproximadamente un 24% del total.
El presidente del BCE, el italiano Mario Draghi, alertó el miércoles del peligro de fragmentación del Eurosistema, donde en unas zonas hay exceso de liquidez y en otras, restricciones importantes. España e Italia están en la parte del Eurosistema con problemas de liquidez y así lo evidencian los datos publicados ayer por el banco central de Italia sobre las apelaciones a la ventanilla de financiación del BCE, que batieron récord en mayo. El volumen ascendió a 272.700 millones de euros.
La mayor parte de este dinero es para refinanciar operaciones de largo plazo, solo 4.000 millones fueron requeridos para necesidades inmediatas de financiación.
El volumen total de peticiones al BCE del conjunto de la eurozona ascendió a 1,12 billones de euros. Por tanto, las cifras de la banca italiana representan aproximadamente el 24% del total.
Aunque España está en el foco del huracán financiero, los bancos italianos también están sufriendo para poder financiarse ante la subida de la prima de riesgo de la deuda soberana italiana, que supera los 430 puntos básicos y que incide en los costes de financiación del sector bancario.
De acuerdo con los datos que ofrece el Banco de Italia, el sector solicitó 255.000 millones en el conjunto de las dos inyecciones de liquidez de largo plazo (LTRO), con vencimiento a tres años, que el BCE realizó en los meses de diciembre y febrero y que supusieron una inyección total en el sistema de un billón de euros.
El BCE ha reconocido que la posibilidad de hacer una nueva LTRO es un instrumento que "está disponible" para la autoridad monetaria, pero no se mostró partidario de emplearlo en estos momentos. De hecho, Draghi insistió en que el potencial de las dos subastas de LTRO aún no ha sido explotado "plenamente".
La banca italiana vivió ayer una buena jornada, con subidas del 3% en Mediobanca; del 2,12% en Banca Popolare Emilia Romagna; del 1,92% en Banca Popolare di Milano; del 0,7% en Banco Popolare y del 0,53% en Intesa Sanpaolo. Las entidades italianas han sufrido, sin embargo, un fuerte castigo durante el transcurso de este año, con pérdidas superiores al 10% en la mayoría de los casos.
Precisamente el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF), el lobby que agrupa los intereses de la banca mundial, pidió ayer a los reguladores europeos que bajen el ritmo de las reformas, que calificó de infernal, porque daña la capacidad de los bancos de otorgar préstamos.