Ángel de Cabo, apartado de la gestión de bodegas de Garvey
El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Cádiz ha apartado al grupo de sociedades del empresario Ángel de Cabo, nuevo propietario de Nueva Rumasa, de la gestión de las bodegas Complejo Bodeguero Bellavista (Garvey) y Zoilo Ruiz-Mateos, así como de la distribuidora Unión de Grandes Bodegas, según confirmaron fuentes jurídicas.
Los administradores concursales de estas empresas solicitaron la suspensión de las facultades patrimoniales ante el "fin liquidatorio" que, en su opinión, persigue la nueva propiedad, según consta en el auto correspondiente a Complejo Bodeguero Bellavista.
Entre otros argumentos, aludieron a que en la causa abierta en la Audiencia Nacional sobre los pagarés de Nueva Rumasa se ha apuntado a la posibilidad de que Ángel de Cabo y José María Ruiz-Mateos acordaran repartirse los beneficios de la liquidación de las empresas del grupo.
Esto, según la administración concursal, influye de manera "muy negativa" en la imagen y credibilidad de la bodega, ya de por sí afectada por la situación concursal, "generando incertidumbre y desconfianza en los trabajadores y en los proveedores y clientes".
Por su parte, los nuevos dueños de Nueva Rumasa presentaron un escrito de oposición en el que señalan que el fundamento de los administradores concursales "parece ser de carácter anticipatorio y preventivo", al tiempo que subrayan que la existencia de una investigación penal no "puede estigmatizar a los nuevos propietarios", que han actuado "con transparencia y colaboración".
"Los indicios que se desprenden del auto dictado por el Juzgado Central de Instrucción son suficientes para haber creado un clima de incertidumbre que perjudica la actividad empresarial de la concursada", sostiene en el auto la juez Nuria Orellana, que estima justificada la solicitud de la administración concursal.
Tras conocer la decisión judicial, el secretario de agroalimentación de CC OO en Cádiz, Luis Páez, ha indicado a Europa Press que la medida "llega tarde". Así, ha lamentado que se adopte después de que se hayan aprobado los expedientes de regulación de empleo (ERE) de Garvey y Zoilo Ruiz Mateos.
Páez ha confiado en que la magistrada también adopte esta postura para las bodegas Valdivia y Teresa Rivero, "cuyos expedientes de regulación de empleo están en suspenso por ofertas de compras presentadas".