Vodafone España reajusta las tareas de sus principales directivos
Vodafone España ha reajustado las funciones de sus principales directivos. Bajo el nuevo organigrama, Francisco Román abandona definitivamente todas las tareas ejecutivas relacionadas con las operaciones de la compañía y se centra en las relaciones externas y cuestiones regulatorias. La gestión del día a día va a ser responsabilidad única del consejero delegado, Shameel Joosub.
Nuevos ajustes en las funciones de los principales ejecutivos de Vodafone España. La compañía comunicó ayer en el Boletín Oficial del Registro Mercantil que Francisco Román ha dejado de ser presidente ejecutivo y ha sido nombrado apoderado solidario de la compañía.
Este movimiento en la cúpula directiva, según explican fuentes de Vodafone España, supone que Francisco Román va a dejar todas las tareas relacionadas con la gestión diaria y las operaciones de la compañía. "Va a seguir siendo presidente, encargándose de cuestiones como las relaciones externas e institucionales, el ámbito legislativo y regulatorio con la relación con las Administraciones públicas y la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) y la responsabilidad social corporativa, entre otras áreas", señalan estas fuentes, que precisan que Román pierde el carácter ejecutivo. Asimismo, explican que el directivo mantiene el cargo de presidente del consejo de administración de Vodafone España.
A su vez, dentro de estos cambios, el consejero delegado de Vodafone España, Shameel Joosub, será el único responsable ejecutivo de la gestión y las operaciones de la compañía. "Se va a encargar de la gestión del propio negocio", afirman en la compañía.
Desde la operadora se señala que este cambio es un ajuste en el organigrama para que cada uno de los dos principales directivos se centre en sus propios temas. "Es una separación de funciones entre Román y Joosub", señalan estas fuentes. Además, recuerdan que Joosub fue nombrado hace poco más de un año consejero delegado y ha vivido desde entonces un periodo de transición, que ya se ha dado por terminado.
Primeros cambios
El primer movimiento en esta dirección se produjo en abril de 2011, cuando Joosub fue nombrado consejero delegado de Vodafone España. El directivo, que también es miembro del comité de operaciones del grupo Vodafone, había sido con anterioridad director general de Vodacom Sudáfrica, filial en el país africano del grupo británico.
Este nombramiento supuso un primer cambio en las atribuciones de Román. El directivo, que trabajó en la antigua Airtel, se incorporó en 2002 a Vodafone como director general de operaciones y poco después, en febrero de 2003 fue nombrado consejero delegado. Con posterioridad, en enero del año 2008, Román pasó a tener el cargo de presidente consejero delegado de la filial española de Vodafone.
La compañía ha vivido un último ejercicio muy complicado por el empeoramiento de la crisis económica (con el consiguiente aumento del desempleo) y el endurecimiento de la competencia. Una situación que llevó a muchos usuarios a buscar las mejores ofertas. Vodafone España registró una bajada de los ingresos por servicios del 9,4% hasta 5.044 millones de euros por "la bajada del negocio de la voz móvil". El ebitda descendió un 24,9% hasta 1.193 millones de libras (unos 1.468 millones de euros), con un descenso de 5,5 puntos porcentuales del margen de ebitda.
La operadora está tratando de recuperar posiciones con su política comercial en el actual entorno de competencia. Vodafone España cerró el último ejercicio con 17,74 millones de clientes de telefonía móvil, con un aumento de 89.000 altas netas entre enero y marzo.
Según la CMT, Vodafone España registró una ganancia de 28.610 líneas en marzo. En enero había ganado 72.290 líneas y en febrero había perdido 61.200. A la conclusión de marzo, la empresa tenía una cuota en el mercado español del móvil del 28,57%, frente al 28,80% del mismo mes en 2011.
La compañía inicia la aplicación del ERTE
Vodafone España ha realizado diversos ajustes en los últimos tiempos, si bien ha mantenido el conjunto de su plantilla. La firma llegó a un acuerdo con los sindicatos en marzo para la ejecución de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) durante dos semanas para la totalidad de la plantilla, compuesta por 4.300 empleados.En este sentido, CC OO señaló ayer que ha firmado la comunicación del ERTE. El sindicato indicó que, tras este paso, su aplicación va a comenzar a partir de junio, extendiéndose hasta diciembre, en función de los departamentos. De igual forma, dijo que la mayor parte del ERTE se aplicará durante el periodo de jornada intensiva de verano. CC OO recordó también que el acuerdo recoge el compromiso de la operadora de no aplicar un expediente de regulación de empleo extintivo, desde la firma hasta el 31 de marzo de 2013, y de no externalizar actividades antes del 31 de diciembre del presente año.