Alarma en la industria turística
Los empresarios del sector turístico han dado una nueva señal de alarma. Y es que la temporada alta se presenta fea. De acuerdo con sus previsiones, todo parece indicar que se registrará en ella un descenso del 6% respecto al ejercicio pasado, lo que supone la llegada de 1,9 millones de turistas menos. ¿En qué se basan estos temores? Básicamente, en la extrapolación de los registros alcanzados la pasada Semana Santa, que se cerró con un descenso en la entrada de turistas del 1,7%. El guarismo, con todo, no es lo que más preocupa. Es la tendencia. El análisis de los datos muestra que países como Túnez y Egipto se han recuperado de los efectos de la primavera árabe y están empezando a coger músculo como serios rivales de España. Lo hacen jugando no solo con la tranquilidad político-social, sino también con una notable rebaja de precios. Pero los empresarios están notando un factor corrector adicional. Los hoteleros británicos están haciendo una fortísima promoción de sus ofertas aprovechando el tirón de los Juegos Olímpicos, lo que está influyendo en una caída de las reservas que los establecimientos españoles tienen desde Reino Unido. La economía española no puede permitirse un pinchazo del turismo este verano. Empresas y Administraciones deben reaccionar para evitarlo.