La banca aún necesita tiempo para curar su herida en Bolsa
Los analistas consideran que el sector será una oportunidad cuando se despejen las duda.
Todo empezó con las subprime, en el verano de 2007. A partir de ahí se trazó una línea roja en el sector bancario, que cinco años después los inversores aún no han podido cruzar. La penalización de las entidades ha sido fuerte, mucho, y no ha habido distinción alguna. Todos los bancos españoles cotizan con fuertes descuentos sobre su valor en libros, que en el caso de Bankia llega al 80%.
El castigo a la banca ha tenido replica en otros países europeos. Entidades inglesas, alemanas, francesas, portuguesas, griegas o italianas presentan descuentos similares a las españolas; las tres primeras por su exposición a bancos periféricos y las tres últimas por su problemática situación financiera.
Pero la ganga que presentan las acciones en cuestión de precios sigue sin ser un motivo para invertir. "Por el momento, y aun reconociendo que están baratos, evitaríamos los bancos", explica Victoria Torre, responsable de análisis de Selfbank. "El proceso de reestructuración sigue en marcha y podemos asistir a alguna fusión u operación más. Además quedan varias incertidumbres por resolver y las noticias llegan con goteo; hace una semana se estimaban que las necesidades de Bankia eran de 7.000 millones de euros y ahora se calculan en más de 9.000 millones. Irlanda dijo de una vez cuál era el agujero de sus entidades y la recapitalización no se dilató en el tiempo; fue mucho más transparente", apunta.
La preocupación del mercado sigue centrada en la solvencia de los bancos, en su exposición al ladrillo y en su capacidad para afrontar la recesión económica. El próximo mes se conocerá el resultado de los test de estrés que harán firmas independientes a la banca española y la valoración de la cartera de crédito. En este sentido, Fitch ha comentado que "probablemente se verá otro incremento de la morosidad (...)". Al tiempo, Moody's ha bajado la calificación a 16 entidades; el Instituto Internacional de Finanzas (IIF) ha cifrado las necesidades de capital extra entre 50.000 y 60.000 millones y la OCDE y el propio François Hollande han instado al sector a recapitalizarse. "Los bancos están en plena reestructuración y hay mucha incertidumbre sobre todo lo que pasará. La volatilidad es importante y hace falta que la situación se aclare", explica Marc Ribes, de ActivoTrade. Dentro del sector, hay entidades que consideran acertada la auditoría. "El proceso debería contribuir a mejorar la transparencia sobre la situación de los activos del sector, especialmente los relacionados con el negocio inmobiliario, y ganar confianza en el sistema. (...)", explican desde La Caixa. Pero la entidad hace una advertencia: "En cualquier caso, creemos que los criterios aplicados deberán ser lo suficientemente rigurosos para lograr el visto bueno del mercado; de lo contrario, la prueba se pondrá en duda y constituirá una nueva decepción en el proceso de saneamiento del sistema". Otros temas que preocupan a los analistas y que están sobre la mesa son la situación económica, que puede terminar por afectar a otros créditos de los bancos, además del inmobiliario, y el volumen que mantienen en deuda del Estado.
Los accionistas de los bancos y los potenciales inversores se enfrentan a un escenario difícil. "El problema es que no sabemos cómo va a terminar todo. Banesto, por ejemplo, cotiza a precios del año de su intervención 1993", comenta Luis Benguerel, responsable de Bolsa y derivados de Interbrokers.
Aun con la espada de Damocles encima de los bancos, los analistas aconsejan no vender en este momento. "Hay que acotar pérdidas en el momento que se hace la inversión, ahora no tiene sentido salir, cuando la depreciación del valor de las acciones ya es muy importante. Incluso no sería lógico deshacer posiciones en Bankia", explica Marc Ribes. Las entidades cotizan actualmente en mínimos de más de dos años. "En algunas entidades difícilmente se volverán a ver los precios de 2007 previos a la crisis por el efecto dilutivo de las ampliaciones de capital, como es el caso de Sabadell. En Santander, BBVA o Popular sí podría ser factible la recuperación hacia esas cotas", explica Marc Ribes.
En cualquier caso, las preferencias de los expertos, con la vista puesta en la recuperación, siguen centrándose en los grandes bancos, que son los de mayor peso internacional. Los domésticos aún permanecen al margen. Pero todos tienen en alguna medida potencial para subir.
Las cifras
77% es lo que ha perdido de media el sector bancario paneuropeo desde que alcanzara su máximo histórico en abril de 2007. En dos años se ha dejado más del 40%.0,17 veces es el valor en libros al que cotiza Bankia, el más bajo de las entidades españolas. En su salida a Bolsa, en julio de 2011, partió con un descuento del 60%.2,77 euros es el precio al que cerró Banesto el viernes. Cotiza en niveles de 1993. Los grandes valores están en los niveles más bajos desde 2009.6,82% son las posiciones cortas sobre capital que tiene Popular, el que más dentro del sector. El siguiente es Bankinter, con un 6,75%.