Déficit de 2011, 8,9%
Madrid, Comunidad Valenciana y, en menor medida, Castilla y León y Andalucía registraron en 2011 unos números rojos superiores a los remitidos a Hacienda en febrero. Ello obliga a corregir los datos de déficit del conjunto del sector público, que fueron validados en abril por Eurostat. Así, los números rojos del conjunto de España alcanzaron el 8,9% del PIB en 2011, en lugar del 8,51%.
Reconocer que el déficit que se anunció en su momento es inferior al real supone el peor escenario posible en un momento en que los mercados miran con recelo a España. Sin embargo, los planes de reequilibrio que las comunidades presentaron ante Hacienda y que el Consejo de Política Fiscal y Financiera aprobó ayer -con la excepción de Asturias- reflejan precisamente esa realidad. Como ha avanzado CincoDías.com, el déficit autonómico en 2011 de Madrid, Comunidad Valenciana y Castilla y León fue notablemente superior al que remitieron en febrero a Hacienda, quien a su vez lo envió a Bruselas.
Madrid fue, con diferencia, la comunidad con una mayor desviación. Sus números rojos alcanzaron el 2,2% del PIB frente al 1,3% publicado en febrero. Ello se traduce en 2.027 millones más. Valencia, por su parte, registró un déficit del 4,5% y no del 3,68% y Castilla y León acumuló un saldo fiscal negativo del 2,59% en lugar del 2,35% anunciado. En total, la desviación supera los 4.000 millones de euros. Es decir, los números rojos del conjunto de las comunidades en 2011 equivalieron al 3,3% del PIB frente al 2,94% que todavía figura en el programa de estabilidad.
Todo ello obliga a revisar la información que España remitió a Eurostat y que mostraba que el déficit público del conjunto del país ascendía a 8,51%, una cifra que ya no vale. El dato correcto es que España cerró el año pasado con unos números rojos del 8,9% (95.531 millones de euros). Supone un fuerte varapalo para la credibilidad de las cuentas públicas, aunque resulta en todo punto exagerado comparar esta situación con la de Grecia, que manipuló a sabiendas sus cuentas.
Fuentes de la Comunidad de Madrid ya advirtieron en marzo que la caída de ingresos que registraron en 2011 era superior a la que asignaron en un primer momento. Sin embargo, el desvío ha sido muy superior al previsto. El consejero de Hacienda madrileño, Percival Manglano, señaló que la puesta en marcha del plan de pago a proveedores también ha supuesto inferir un mayor gasto al ejercicio de 2011, un extremo que también confirma Hacienda.
La diferencia en el caso de la Comunidad Valenciana también es notable y, en el caso de Castilla y León, resulta menos grave. En cualquier caso, la nueva cifra del saldo fiscal autonómico del 3,3% evidencia que las comunidades registraron en 2011 el mayor déficit autonómico de su historia en un ejercicio en el que todas ya prometían austeridad, austeridad y más austeridad.
Los nuevos datos no varían el escenario de estabilidad ya fijado. Es decir, las comunidades deben rebajar su déficit al 1,5% este año, lo que supone un esfuerzo de ajuste inaudito de 19.747 millones de euros. La Administración central, por su parte, se ha comprometido a rebajar sus números rojos del 5,1% al 3,5%, lo que equivale a ahorrar 17.450 millones.
¿Por qué Montoro no dio esa cifra cuando la supo?
Cuando el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, apareció ante los medios el jueves después del Consejo de Política Fiscal y Financiera aseguró que el Gobierno actuaría con la máxima transparencia y alabó los esfuerzos fiscales recogidos en los planes de reequilibrio. En ese momento, Montoro ya sabía que el déficit autonómico que el Ejecutivo había remitido a Bruselas era incorrecto. También lo sabía el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, que hasta junio de 2011 fue consejero de la Comunidad de Madrid, la región que ha registrado un mayor desvío.El Gobierno solo reaccionó después de que los medios de comunicación advirtieran que los datos incluidos en los planes de reequilibrio de tres comunidades (Madrid, Comunidad Valenciana y, en mucha menor medida, Castilla y León) reflejaban un déficit superior al publicado en febrero.Desde ese momento hasta que el Ejecutivo reconoció el desvío en un comunicado, pasaron más de seis horas. Fuentes de Hacienda aseguran que Bruselas ya era consciente de esta situación y restaron importancia al incremento del déficit.La nueva cifra de déficit explica que el ajuste previsto en los planes de reequilibrio sea de 18.349 millones, cuando para reducir del déficit del 2,94% anunciado inicialmente al 1,5% que exige Hacienda este año bastaban 15.560 millones. Cuando se le preguntó a Montoro por ese extremo, el ministro de Hacienda evitó explicar que la causa era que, en realidad, el déficit autonómico que todo el mundo tenía en mente ya no era válido y se guardó para sí comunicar que los números rojos ascendieron en 2011 al 3,3% del PIB.