Hacienda aprobará hoy la mayoría de los planes de ajuste autonómicos
El Consejo de Política Fiscal que se reúne hoy aprobará los planes de ajuste autonómicos que las comunidades remitieron hasta la noche del lunes a Hacienda. "Vamos bien", señaló ayer el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, acerca de las medidas de austeridad que los Ejecutivos autonómicos están adoptando para rebajar su déficit al 1,5% del PIB.
En un momento en que la prima de riesgo se mueve en torno a los 500 puntos básicos y los mercados miran con recelo a España, el Gobierno y las comunidades intentarán trasladar hoy una imagen de unidad y compromiso con la estabilidad presupuestaria. El tono del Ejecutivo ha virado de forma notable y el discurso crítico -casi amenazante- hacia los Gabinetes autonómicos de las últimas semanas ha dado paso a ligeras alabanzas hacía la políticas de austeridad adoptadas.
Tanto el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, como el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, apuntaron ayer que los planes de ajuste que las comunidades han presentado para asegurar que cumplirán el límite de déficit son "satisfactorios y creíbles". "El objetivo es demostrar que la España de las autonomías es viable", señaló Montoro durante un acto organización por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y PwC. En cualquier caso, es previsible que algunas de ellas no logren el visto bueno del Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebra hoy y que reúne a los representantes de Hacienda del Gobierno y de las comunidades. Asturias tiene todos los números para suspender. "Nos da igual la situación política, si tenemos que actuar, actuaremos", señaló Montoro respecto a Asturias, una comunidad que tiene un Gobierno en funciones a la espera de que se forme el nuevo Ejecutivo del PSOE con el apoyo de IU y UPyD. De hecho, si bien Montoro utilizó un tono conciliador con las comunidades autónomas, también recordó que el Ejecutivo no dudará en aplicar la nueva Ley de Estabilidad Presupuestaria, que contempla la posibilidad de intervenir una comunidad autónoma. La región que está más cerca de este escenario es Asturias
Las cuentas de la Comunidad Valenciana también despiertan ciertos recelos. Es más, hasta el último minuto, Hacienda ha mantenido con las comunidades un diálogo constante para clarificar medidas y retocar aspectos de los planes de ajuste. Es posible que algunos de ellos no se aprueben mañana y queden pendientes de una nueva votación en otro Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebrará en quince días.
En cualquier caso, la experiencia indica que una cosa es presentar un plan de medidas de austeridad y otra muy distinto cumplirlo. Montoro vigilará de cerca que las políticas de ajuste se ejecuten para evitar lo que sucedió en 2011, cuando después de prometer austeridad, las regiones registraron un déficit mayor al del ejercicio anterior.
Para este año, las comunidades deben rebajar sus números rojos en 15.560 millones, un esfuerzo inaudito. Todas se han comprometido con el objetivo de déficit del 1,5%, incluida Cataluña y Andalucía que en su momento no apoyaron el objetivo de estabilidad. A cambio, pedirán -algunas suplicarán- que el Gobierno ayude a la financiación de las comunidades a través de los hispanobonos, una decisión que, en cualquier caso, corresponde al Ministerio de Economía y no al de Hacienda. Buena parte de las regiones se encuentran con los mercados de deuda cerrados a cal y canto, lo que les obliga a pagar intereses desorbitados para acceder a crédito.
En este sentido, argumentan que podrían financiarse a tipos más razonables si tuvieran el respaldo del Tesoro. Montoro recordó que el Gobierno no dejará caer a ninguna comunidad, aunque no aclaró si finalmente se recurrirá a los hispanobonos. Eso sí, rechazó la posibilidad de "compartir los riesgos", ya que ello perjudicaría a las regiones que "han hecho los deberes". Así, el Tesoro avalará a los territorios que cumplan y pedirá más medidas al resto antes de auxiliarlas financieramente.
Respecto al plan de pago a proveedores, el mecanismo que ha puesto en marcha el Ejecutivo para abonar las facturas atrasadas de ayuntamientos y comunidades, Montoro señaló que las empresas empezarán a cobrar sus deudas con los municipios a finales de este mes y en junio en el caso de las regiones. Ello permitirá inyectar unos 27.000 millones de euros, una de las pocas medidas de estímulo aprobadas hasta ahora. Y es que para Montoro, la mejor política para alentar el crecimiento es reducir los números rojos. Por ello, rechazó de forma tajante la posibilidad de relajar la senda de consolidación fiscal o posponer más allá de 2013 la obligación de rebajar el déficit al 3% del PIB.
Con ese objetivo, el Gobierno subirá impuestos indirectos como el IVA el próximo año y rebajará las cotizaciones sociales que pagan las empresas. Además, Hacienda está poniendo muchas esperanzas en las nuevas medidas antifraude. "La pregunta con IVA o sin IVA se tiene que acabar y se va acabar", señaló Montoro ante un auditorio formado por empresarios y altos directivos.