_
_
_
_

De Guindos se lleva el ultimátum de Grecia

Todo parecía preparado para que el Eurogrupo lanzase ayer un ultimátum a Grecia. Sin embargo, fue el ministro español, Luis de Guindos, quien sufrió la impaciencia de sus colegas de la Eurozona.

De Guindos vuelve a Madrid con una orden de apremio para clarificar en apenas dos meses el valor de los 3 billones de activos de la banca española. Por supuesto, la tarea no le corresponde a su ministerio. Ni siquiera al "antiguo" supervisor bancario español, todavía conocido como Banco de España.

Los socios europeos no se fían de ninguno de ellos. El descomunal encargo correrá por cuenta de dos auditoras internacionales (que pasarán presumiblemente una jugosa factura) bajo la tutela del Banco Central Europeo. Una cesión de soberanía digna de país intervenido.

Quizá por eso el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, tampoco descartó el rescate completo. Y ante las dudas sobre el origen de los miles de millones necesarios para sanear la banca española, el luxemburgués dejó abierta la posibilidad de recurrir a los fondos de rescate europeos. Un estigma para la economía española, desde luego. Pero tal vez, después de la llegada de las auditoras y el BCE, ya se pueda decir "un estigma más".

Y a todo esto, ¿qué ocurrió con Grecia, país al que se iba a poner de patitas en la calle como si fuera el Dino de los Picapiedra? Pues como en los dibujos animados, se quedó dentro y bastante tranquilo.

Juncker incluso reconoció que el infausto Memorándum diseñado por la troika (CE, BCE y FMI) para someter al país es renegociable. "Si se dan circunstancias excepcionales, no excluimos un debate sobre la prolongación de los plazos", señaló al final de la reunión del Eurogrupo.

"Pero primero tiene que haber un Gobierno y luego que se den esas circunstancias excepcionales", señaló. Cinco años de recesión, 20% de caída del PIB y 20% de paro parece que merecerían ese calificativo incluso para los matasanos del FMI.

Foto: llegada del Luis de Guindos al Eurogrupo celebrado ayer en Bruselas (B. dM., 14-5-2012).

Archivado En

_
_