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Raúl Calleja. Director de la Semana Internacional de la Construcción

"La inversión pública es clave para el éxito de la rehabilitación"

El directivo considera que, pese a que se multiplican los vehículos de financiación para rehabilitar edificios, será el nivel de inversión pública lo que determine su éxito como nicho de mercado para la construcción.

Curtido ya en otras importantes ferias, como Fitur, Motortec o Fruit Atraction, Calleja, de 36 años, ha sido el encargado de organizar la primera Semana Internacional de la Construcción. El directivo se muestra confiado en poder aportar su experiencia comercial al evento.

¿Cuáles son las novedades más importantes que trae este año la feria?

La más evidente y significativa es la agrupación bajo un mismo techo y en las mismas fechas de tres ferias relacionadas con la temática de la construcción, que son Veteco, Piedra y Construtec. Se trata de un sector que, como no hay obra nueva en España, está mirando al exterior y a la rehabilitación de edificios. La feria se ha reorientado hacia esta nueva realidad, invitando a casi 500 compradores de otros países y enfocando mucho la temática de la muestra en la sostenibilidad y la eficiencia energética de los edificios.

¿Cuál es el perfil de la representación internacional en la feria?

Son clientes de los mercados en los que más trabaja el sector constructor español. Básicamente, el latinoamericano, entre los que destacan Chile, Brasil y Panamá, muy centrados en grandes desarrollos urbanísticos y de infraestructuras. El norte de África también es un área muy interesante para las empresas españolas, como también los países de Europa del Este y de Oriente Próximo.

¿La rehabilitación de viviendas tiene suficiente tirón para arrastrar al mercado nacional?

Probablemente no sea suficiente, pero sí que es la única vía en que, a través de las nuevas normativas de apoyo y planes renove, puede devolver en los próximos años ciertas dosis de optimismo al sector. Las nuevas disposiciones europeas exigen que para 2020 todos los edificios nuevos deben de tener un consumo de energía casi nulo, y ahí hay un buen nicho de mercado.

Cita la internacionalización como una de las vías de escape de la construcción. ¿Cree que las empresas pequeñas tienen posibilidades de competir ahí con las medianas y grandes?

Sin duda, las grandes constructoras son las que tienen más posibilidades de salir al exterior. Pero en este sector hay muchísima subcontratación, por lo que realmente las empresas que tienen expositores en nuestra feria son las que suministran a las grandes compañías, como los fabricantes de ventanas, acristalados, piedra, etc.

¿El sector está encontrando apoyos para poner en marcha las rehabilitaciones?

Estamos esperando a ver cuál es el nivel de apoyo y de inversión de las Administraciones en cuanto a política energética en los próximos años. Eso definirá el nivel de ayudas e inversión en cuanto al plan Renove de cara al futuro y que puede ayudar al sector a dinamizarse. Lo que está claro es que esperar obra nueva a corto y medio plazo es absurdo, va a moverse en niveles muy bajos. Solo la rehabilitación y la especialización en ahorro energético son apuestas de futuro.

¿Cómo se puede innovar en un sector como el de la construcción?

Lo que más vemos ahora son apuestas por nuevos materiales, especialmente en el sector de la ventana y el acristalamiento, que se esfuerza mucho en evitar al máximo las filtraciones de calor. La generación de energía para el autoconsumo o las redes inteligentes de distribución de energía, que tienen en cuenta todo el edificio, y no solo ventanas y estructuras, se están viendo mucho.

¿Cómo se puede evitar que la promesa de eficiencia energética de los edificios no se quede en papel mojado, como el coche eléctrico?

Hay empresas de servicios energéticos que ofrecen financiación para instalar estas nuevas tecnologías sin inversión por parte del cliente final. El ahorro energético generado se amortiza con la inversión realizada por el instalador. También hay empresas de generación de energía que ofrecen productos que incluyen la realización por su parte de la primera inversión y lo que obtienen es el beneficio en la amortización de este ahorro energético. Hay por tanto soluciones de financiación, pero insisto en que el apoyo de la Administración será fundamental.

"Se valoran los proveedores integrados"

Rehabilitación y adaptación de los edificios a las nuevas exigencias europeas de eficiencia energética, según las cuales a partir de 2020 el consumo de energía de las edificaciones debe ser casi nulo, son los motores del sector, afirma Calleja.En la propia feria se conocerán los resultados de algunos concursos que reman en ese sentido, como los de Veteco, planteados para ver cuánto frío se es capaz de ahorrar con una ventana determinada y con los mínimos costes posibles.Las posibilidades de las empresas para sacar provecho de las nuevas exigencias relativas a la eficiencia energética son múltiples. La especialización en alguna de sus dimensiones (sistemas de climatización, estructuras aisladas, etcétera) es siempre un valor añadido, pero Calleja incide sobre la integración."Las empresas están empezando a valorar mucho que sus proveedores integren estas facetas, que aporten soluciones en el autoconsumo energético, redes inteligentes y sostenibilidad", señala el director de la feria. "Se tendrá que intentar ofrecer todos esos servicios conjuntamente".

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