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La cámara británica eleva las garantías para algunos bonos nacionales

LCH.Clearnet pone la zancadilla a la deuda española

La cámara de contrapartida británica LCH.Clearnet ha disparado contra la deuda española, si bien con poca munición. Esta plataforma, que sustituye al clásico mercado interbancario, exigirá depositar a los bancos más deuda española para poder obtener liquidez.

Hoy ha sido una sesión positiva -dentro de lo que cabe- para la deuda española. La rentabilidad del bono español a 10 años ha bajado hasta los 5,8% desde el 5,86% de ultima hora de ayer, con lo que su prima de riesgo, comparada con el bund alemán al mismo plazo, se ha rebajado hasta los 406 puntos desde los 417. Sin embargo, la cámara de contrapartida LCH.Clearnet, uno de los mayores proveedores de liquidez a los bancos de los países denominados periféricos desde que estalló la desconfianza en el mercado interbancario, ha disparado hoy contra la deuda nacional, según la información divulgada por la agencia Bloomberg.

LCH.Clearnet ha publicado una circular en la que degrada el valor de los bonos españoles. Ahora, para utilizar los que vencen entre 3,25 y 4,75 años el margen pasa del 4,4% al 4,9%, mientras que en la deuda de entre siete y 10 años se incrementa del 8,4% al 11,2%. ¿Qué quiere decir esto? Pues que para que una entidad obtenga liquidez de 1.000 millones de euros con deuda española a 10 años deberá depositar títulos por valor de 1.112 millones de euros, cuando hasta el momento le bastaban 1.084 millones.

La deuda española pierde por tanto valor en el mercado, lo que a su vez puede alimentar la espiral de ventas que sufren los bonos nacionales en los últimos tiempos: obtener liquidez con ellos en LCH.Clearnet es más caro y, lógicamente, valen menos en el mercado. Los bancos españoles, ante el deficiente funcionamiento del mercado interbancario clásico, han recurrido a este sistema para proveerse con liquidez. Y, claro está, el colateral que más utiliza la banca nacional es la deuda española.

También Francia ha sufrido el envite de LCH.Clearnet. Los cambios son muy inferiores a los que han afectado a España, pero su deuda se verá igualmente penalizada. En su caso, son los bonos con vencimiento entre 10 y 15 años los valdrán menos, porque el margen se eleva desde el 6,1% hasta el 6,4%. El resto de la deuda francesa y también de la italiana permanece como estaba.

En circunstancias normales, la decisión de LCH.Clearnet podría hasta pasar casi desapercibida, pero esta crisis ha trastocado todo el esquema de normalidad con que se vivía hasta ahora. Y uno de los elementos que ha cambiado es el papel de las cámaras de contrapartida para obtener liquidez a corto plazo. Con el mercado interbancario prácticamente cerrado, estas plataformas (y la británica LCH.Clearnet es la mayor en Europa) se han convertido en el salvavidad de la banca para mantener la normalidad de las operaciones. Ahora cualquier negocio realizado con deuda española como garantía estará más penalizado.

En el pasado, LCH.Clearnet ya ha puesto su granito de arena en la profundización de la crisis. Primero con Irlanda y luego con Portugal, la cámara de contrapartida endureció las necesidades de garantía para la deuda de estos países en cuanto sus bonos superaron los 450 puntos básicos, siguiendo al pie de la letra su normativa interna. A más riesgo, mayores garantías. Ambos países entraron en una espiral de crecimiento del coste de financiación y desconfianza que terminó con la necesidad de rescate. LCH.Clearnet también tuvo que aplicar el correctivo a Italia cuando cruzó la barrera de los 450 puntos, pero este país, quizá por su tamaño, pudo reconducir la situación.

La medida tomada este miércoles con la deuda española y la francesa no responde al mismo escenario. La prima de riesgo de España está en el entorno de los 400 puntos y la francesa ronda los 120 puntos, así que ambas están lejos (por ahora) de la línea roja de los 450 puntos. Pero eso no quiere decir que el efecto para la deuda de los dos países no sea pernicioso.

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