Los directivos españoles, expulsados de YPF
Funcionarios del Gobierno argentino encabezados por el subsecretario del Ministerio de Planificación, Roberto Baratta, han tomado el control de YPF y desplazado a los directores ejecutivos españoles y argentinos de la compañía.
Baratta, que hasta hoy era el único representante del Estado argentino en el directorio de YPF, se presentó con una lista de directores ejecutivos que, según el Gobierno, deben renunciar, y ordenó cambiar la seguridad del edificio, según fuentes de la petrolera consultadas por Efe.
El funcionario ordenó a los ejecutivos, entre ellos el español Antonio Gomis, director general de Repsol en Argentina y adjunto a la vicepresidencia de YPF, que tomaran sus pertenencias personales y abandonaran el edificio, que permanece cerrado salvo para funcionarios argentinos.
Baratta se presentó en la sede de la compañía, en el barrio de Puerto Madero, de Buenos Aires, apenas unos minutos después de que la presidenta Cristina Fernández anunciara por cadena nacional la intervención inmediata de YPF y el envío al Congreso de un proyecto de ley para expropiar el 51 por ciento de la empresa, participada en un 57 por ciento por la española Repsol.
Fernández decretó que el ministro de Planificación, Julio de Vido, asuma la intervención de la compañía, con la asistencia del viceministro de Economía, Axel Kicillof, a quien medios locales señalan como uno de los principales impulsores de la expropiación de la petrolera.
La cotización de las acciones de YPF fueron suspendidas hoy en la Bolsa de Buenos Aires tras el anuncio de expropiación del Gobierno, que declaró "de utilidad pública y sujeto a expropiación" el 51% del patrimonio de la mayor petrolera argentina.