Japón discutirá con el G20 los detalles de una eventual contribución al FMI
El ministro japonés de Finanzas, Jun Azumi, afirmó hoy que espera que la próxima reunión de Ministros de Finanzas del G20 de Washington sirva para avanzar en los detalles de una eventual contribución al Fondo Monetario Internacional (FMI).
"Creo que sería mejor para los mercados y la economía global si somos capaces de alcanzar progresos (en las contribuciones al FMI) cuando nos reunamos en Washington el 20 de abril", afirmó Azumi en declaraciones recogidas por la agencia local de noticias Kyodo.
Además, según Azumi, Japón "querría consultar con otras naciones, como Estados Unidos, antes de decidir los detalles de su contribución", para lo que planea reunirse con otros países clave en el FMI como China o Alemania.
Azumi también aplaudió la decisión de los Ministros de Finanzas de la eurozona de reforzar el cortafuegos de prevención en Europa, aunque se mostró precavido al afirmar que habrá que ver si la cantidad es suficiente para contener la situación en la región.
El organismo, con sede en Washington, busca reunir hasta 600.000 millones de dólares en recursos adicionales destinados a préstamos para poder acometer los crecientes desafíos globales, en especial para aliviar las tensiones por la crisis de deuda europea.
Japón, con la segunda mayor cuota en el FMI por detrás de EEUU, ha indicado que estudia diversas opciones para frenar el contagio de la crisis a países como España e Italia, pero también ha señalado en numerosas ocasiones que los líderes europeos deben antes hacer más esfuerzos para afrontar los problemas fiscales.
Por su parte, el primer ministro nipón, Yoshihiko Noda, confirmó anoche a la canciller alemana, Angela Merkel, con la que mantuvo una conversación telefónica, que Japón está dispuesto a considerar su contribución al FMI, una vez que Europa ha mostrado su esfuerzo para prevenir el contagio con el aumento de los fondos de rescate.
Merkel, por su parte, le comunicó su esperanza de contar con el apoyo de Japón para reforzar los recursos del organismo, que ha jugado un papel clave a la hora de hacer frente a la crisis de deuda de la eurozona, precisó Kyodo.