Bruselas y la CMT pactan en el conflicto de las tarifas de terminación móvil
La Comisión Europea y la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) han negociado un acuerdo para el adelantamiento del calendario de bajadas de las tarifas de interconexión móvil a abril de 2013.
Según fuentes conocedoras del proceso, ambas partes han estado negociando en las últimas semanas para llegar a un acuerdo en esta cuestión que pone fin a las discrepancias y que es bueno para ambas partes.
La intención inicial de la CMT era situar el fin del calendario de bajadas de las tarifas de terminación en red móvil en diciembre de 2013 (de hecho ya lo había adelantado en ocho meses). Sin embargo, a principios de marzo, la Comisión Europea exigió que se adelantara la bajada a diciembre de este mismo año. De esta manera, ambas partes han buscado un término medio en sus diferentes propuestas.
Las tarifas pasarán de cuatro céntimos por minuto (4,98 céntimos en el caso de Yoigo) a 1,09 céntimos en julio de 2013. Es decir, el descenso será de entre un 75% y un 80%.
Al llegar a un acuerdo, además, España se evita entrar en el denominado procedimiento de fase 2. Y es que, de no haber un acuerdo, debía de ser el BEREC, organismo que agrupa a los órganos reguladores de telecomunicaciones de los países europeos, quien realizase un informe sobre la cuestión. En el estudio podría dar la razón a la Comisión Europea o bien contradecirla.
El nuevo calendario puede provocar nuevas disputas entre los reguladores y los operadores. En su argumentación anterior, la Comisión Europea afirmó que el plan de la CMT "podría significar un año más de precios innecesariamente altos para los usuarios españoles, en un momento en que ya se encuentran muy afectados por la crisis económica".
Frente a esta visión, las grandes operadoras españolas aseguraron que el precio del móvil está cayendo a un ritmo de casi el 10% anual y advierten de que "sólo el 20% de la bajada de las tarifas de interconexión repercuten finalmente en los precios para el usuario final". Las telecos afirmaron que la reducción de estos precios de una vez o en un plazo breve afectaría a los ingresos que ya tienen establecidos en sus presupuestos, y tendría un "impacto desestabilizador" en el mercado móvil. "Se mermaría nuestra capacidad de inversión", aseguran.