La banca pide acabar una reestructuración financiera "sin rumbo preciso"
El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, ha pedido acabar una reestructuración financiera ahora "sin rumbo preciso" y ha considerado hoy que sólo se podrá hablar de éxito si las entidades viables salen reforzadas.
Martín ha considerado que es "fundamental" que las autoridades decidan si hay que adelantar las subastas de las entidades en manos del Estado, como Banco de Valencia, CatalunyaCaixa y Novagalicia.
Al tiempo que ha instado al Ejecutivo a aclarar quién pagará la reestructuración del sistema financiero español, porque ha advertido de que hay que tener "mucho cuidado" para que el coste no perjudique al sistema viable, como advierten algunas agencias de calificación.
En este sentido se ha preguntado para qué se creó el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) si se está recurriendo al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que se nutre de las aportaciones del sector y al que se ha recurrido para vender la CAM y Unnim.
El presidente de la patronal bancaria aprovechó para valorar las reformas tomadas por el Gobierno, pero ha incidido en que hay que acertar en ellas, especialmente en la financiera y "no dar ventajas competitivas a nadie, especialmente a una entidad si no es viable".
La condición que pone la banca al proceso de concentración es que se preserve la competitividad en el sistema financiero español para que haya entidades "sólidas y rentables que compitan entre sí".
Por eso, en un plano más general, Martín ha aventurado que la reestructuración financiera seguirá durante los próximos 5 o 6 años, cuando le tocará al conjunto del sector europeo.
En su intervención, Martín ha criticado la existencia de once reales decretos sobre el sector financiero en los últimos años y que algunos, como el de las mayores exigencias de capital diseñado por el anterior Gobierno, no dieron los frutos esperados.
Como ejemplo, en su opinión, la absorción de Banca Cívica por parte de CaixaBank, una "magnífica operación" por la que Martín ha felicitado a ambas entidades, "especialmente a La Caixa", aunque a renglón seguido dijo que el Banco Popular lo hizo "antes y mejor" con Banco Pastor.
Para el máximo responsable de la patronal bancaria, el problema siguen siendo las entidades "no viables" y dejando caer que entre ellas puede estar una de las grandes, tras varias preguntas de la prensa.
Eso sí, ha subrayado que "son viables si se gestionan bien" y ha añadido que en este momento las entidades españolas tienen una "buena gestión".
En cualquier caso, ha explicado que el consejo de una administración es el primero que tiene que decir si su entidad es viable o no porque Martín no entiende cómo es posible que vean sus cuentas, las analicen y no digan si es inviable.
"No se lo tiene que decir el mercado", sino que debe ser la propia entidad, su auditor o el supervisor el que reconozca que una entidad financiera no es viable para así ayudarla, siempre que antes esa propia institución no lo reconozca y diga: "aquí está mi plan de reestructuración".
La conclusión del presidente de la AEB de estos años de crisis es que mientras el sector bancario no viable se reestructura, el viable tiene que hacer frente a la recesión económica, al riesgo soberano, al coste de la reestructuración o a otros como financiar parte de la exclusión social.
Aunque por si esto sonaba a una crítica al Gobierno, Martín ha señalado que los bancos "colaboraremos y colaboramos" con el Ejecutivo y sus decretos leyes.