Guindos pide a China confianza en las medidas de ajuste de España
Quiere reforzar los lazos con el segundo mayor importador mundial
China ha desplazado a Alemania y a EE UU como el principal eje del comercio internacional. Es el mayor exportador del mundo, con una cuota de mercado del 10,5%, más de dos puntos por encima de sus predecesores (EE UU y Alemania) y amenaza con convertirse en breve en el mayor importador del mundo, destronando a EE UU, tal y como recalcó ayer el ministro chino de Comercio, Chen Deming.
Esta pujanza ha atraído a numerosos países a China en busca de inversores y compradores. Ayer le tocó al ministro español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, quién reclamó a las instituciones inversoras chinas confianza en las medidas del Gobierno español para reconducir el desequilibrio fiscal. "España desea estrechar una relación con China que va más allá de las dificultades específicas del momento. La economía china es muy importante para cualquier país y para España lo es estrechar vínculos con ella", afirmó ayer en Pekín tras reunirse con los directivos del Banco de Inversión de China, del Fondo Nacional de Pensiones y de la Administración Estatal de Divisas.
El titular de Economía y Competitividad, que hoy prosigue su gira asiática camino de Singapur, reconoció haber encontrado mucho interés de la parte china en la economía española, y en especial por los lazos que mantiene con sus socios de América Latina. "A España le interesa dar valor a una relación con el país asiático en ambos sentidos, a medio y largo plazo, ya que China juega un papel muy importante en el reequilibrio de la economía mundial, reduciendo su excedente externo e impulsando la demanda interna, algo positivo para nuestras exportaciones. Es un camino de ida y vuelta en las relaciones comerciales y de inversión entre ambas economías", subrayó.
China es el mayor importador de España fuera de la zona euro, con una cuota del 7,1%, tan solo superada por Francia y Alemania. En el caso de las inversiones aún hay mucho margen de mejora, puesto que en 2011 apenas superaron los 55 millones de euros, lo que supone un 0,2% del total.
Uno de los mayores apoyos durante la crisis
En plena crisis de deuda soberana en la zona euro, China emergió como uno de los principales valedores de España entre las grandes potencias mundiales. En enero de 2011, el viceprimer ministro chino, Li Keqiang, visitó Madrid acompañado por una comitiva de 40 grandes compañías, dispuestas a invertir en España.Keqiang se comprometió a comprar 6.000 millones de euros en deuda española, el mismo montante que había comprometido semanas atrás en Portugal y Grecia, dos de los países más perjudicados por el repunte de sus primas de riesgo.Durante la visita también se firmaron 16 acuerdos comerciales por un monto total de 7.500 millones de dólares (unos 5.600 millones de euros), en sectores tan diversos como renovables, tráfico aéreo o alimentación.