Ford contratará un millar de empleados hasta 2013 para fabricar los nuevos modelos
La planta de Ford de Almussafes empezará a contratar nuevo personal tras el verano para iniciar la fabricación del nuevo Kuga, uno de los dos modelos que la multinacional asignó a finales de 2011 a la factoría valenciana, según explicó a CincoDías el presidente de Ford España, José Manuel Machado.
El directivo afirmó que al final del periodo de implantación de los nuevos modelos -cuando sean capaces de trabajar a tres turnos a mediados de 2013- habrán contratado 1.000 nuevos operarios. Machado destaca que Ford ha transformado completamente la producción en sus instalaciones españolas, sustituyendo los actuales modelos por otros de mayor valor.
Concretamente, el Fiesta, el K y el Focus han dado paso al C-Max y Gran C-Max (actualmente ya en producción en España), al Kuga (que entrará en la cadena tras el verano) y el vehículo comercial Transit Comet que empezará su montaje a partir del próximo año. En estos tres modelos, la multinacional ha destinado 1.100 millones de euros de inversión. Las previsiones son fabricar durante un año completo 70.000 unidades del Kuga, que se montará en exclusiva en Almussafes para el mercado europeo. Igualmente, se fabricará en plantas del grupo situadas en Estados Unidos (donde se conoce como Ford Escape) y China, para esos mercados. De la Transit Comet se podrán alcanzar las 120.000 unidades a un ejercicio completo. La factoría podría alcanzar las 350.000 unidades al año.
Respecto al mercado español, el directivo explica que las previsiones son ganar cuota de mercado de medio punto gracias a los nuevos lanzamientos que tiene previstos la marca. Además del Kuga, Ford ha presentado en el Salón de Ginebra la pasada semana el B-Max.
De todas maneras, Machado destaca que el mercado puede variar si finalmente el Gobierno decide aprobar un plan de ayudas a la compra. El directivo, que se reunió recientemente con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, considera que en una primera fase el Ejecutivo tiene que afrontar reformas estructurales. Los estímulos a la demanda, de llegar, quedan relegados a una segunda fase, que podría empezar a cobrar forma después del verano, según Machado.