_
_
_
_
Critica que comunidades y ayuntamientos hayan disparado las contrataciones

Beteta urge a las regiones a reducir unas plantillas sobredimensionadas

"Nada que merezca la pena es fácil". Con esta proclama, Antonio Beteta, secretario de Estado de Administraciones Públicas, apremió ayer a las comunidades y ayuntamientos a reducir sus plantillas. Beteta cree que las Administraciones están "sobredimensionadas" tras años de "bonanza y de ofertas públicas no justificadas". Las nóminas de los empleados públicos suponen casi el 40% de los gastos de las regiones, unos 58.825 millones de euros al año.

Beteta urge a las regiones a reducir unas plantillas sobredimensionadas
Beteta urge a las regiones a reducir unas plantillas sobredimensionadasPABLO MORENO

El hombre de confianza del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se presentó con un montón de datos en la última jornada del Encuentro Financiero Internacional organizado por Bankia y el diario El País. Un día después de que la mayoría de los Ejecutivos autonómicos considerara que no puede recortar en 2012 sus números rojos en 15.500 millones de euros, Beteta criticó que las regiones y los ayuntamientos hayan aumentado sus plantillas desde 2001 un 44% y un 39%, respectivamente, "mientras la Administración general las reducía en un 22%".

"Esto ha provocado que en solo 10 años se haya incrementado en más de 440.000 el número de empleados que trabajan en las Administraciones", explicó el secretario de Estado, quien cree que, en muchos casos, el personal se multiplicó por "clientelismo" y no para mejorar los servicios públicos. "Y tampoco se debió a la transferencia de competencias, sino a la multiplicación de entes, empresas y nuevos organismos públicos".

El secretario de Estado consideró que las comunidades y el Estado deben reducir las más de 4.000 entidades de este tipo que hay en España. El Gobierno ya ha empezado "la reestructuración", recordó Beteta. "No solo en el sector público del Estado. La reestructuración ha llegado a los altos cargos, a la presidencia del Gobierno y a la secretaría de Estado. Se ha reducido en un 18% el número de altos cargos (lo que supone 88 menos). Hemos limitado el sueldo a los directivos de las empresas públicas. Y no nos vamos a quedar solo en un primer nivel. No quiero ser alarmista, pero la economía española se encuentra en una encrucijada. Necesitamos todo tipo de impulsos para salir cuanto antes de la crisis. Tenemos la obligación de salir de ella más fuertes y preparados. No es solo por las demandas de nuestros socios europeos, sino por nuestro más elemental sentido común", añadió.

Efectos de la reforma

España cuenta con 2.690.099 trabajadores públicos entre funcionarios, personal laboral y aquellos contratados directamente por las Administraciones, según los últimos datos oficiales. De ellos, poco más de un millón no son funcionarios. Las comunidades tienen 1.347.835 empleados -434.942 de ellos no funcionarios-.

La reforma laboral aprobada por Mariano Rajoy contempla los despidos colectivos en el sector público para los empleados de las empresas públicas y para el personal laboral contratado directamente por los ayuntamientos, las regiones y los ministerios, no así los casi 1.700.000 funcionarios que hay en el país.

En situación de "insuficiencia presupuestaria sobrevenida y persistente", las Administraciones pueden recurrir a un expediente de regulación de empleo (ERE) por causas económicas y despedir con una indemnización de 20 días por año trabajado sin que la autoridad laboral tenga que aprobarlo.

El Gobierno anunció la semana pasada que ha aprobado un préstamo sindicado de 35.000 millones de euros para que las comunidades y ayuntamientos puedan pagar a sus proveedores. Los bancos ofrecen la cuantía (20.000 millones de euros para los ayuntamientos; el resto para las regiones), pero es el Estado quien da el aval.

Y Beteta lo quiso recordar un día después de que la mayoría de los Ejecutivos autonómicos considerara en privado casi imposible bajar sus déficits en un año del 2,94% con el que cerraron 2011 al 1,5% sin recortar el Estado de bienestar y asumir un alto coste político. "El Gobierno ha dado muchos pasos", replicó el secretario. "Ahora les toca a ellos dar los siguientes".

La cifra

44% es lo que han aumentado las comunidades sus plantillas en 10 años, según cálculos del Ejecutivo central

Las recetas de la Fed para evitar otra crisis

La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) apuesta por reforzar las reservas de capital de las entidades financieras y regular los flujos de liquidez en el sistema como medidas para evitar nuevas crisis. El director adjunto de la división de asuntos monetarios de la Fed, David López-Salido, señaló ayer durante su intervención en el Encuentro Financiero Internacional organizado por Bankia y El País, que se celebra en Madrid, que también es importante que parte de la recapitalización de la banca se haga a través de instrumentos como depósitos a minoristas y recursos propios.En este sentido, añadió que la regulación de la liquidez del sistema financiero está previsto que se haga a través del control de la cantidad y no del precio, aunque apuntó que es una cuestión "en discusión". Esto afectaría a la banca de inversión de dos maneras: con la necesidad de mantener reservada una parte de los activos seguros para hacer frente a necesidades urgentes de liquidez y con la obligación de que parte de esta financiación tenga origen minorista, según explicó. López-Salido insistió en que es importante evaluar los efectos que estos condicionantes de capital y liquidez van a tener sobre la concesión de créditos antes de aplicarlos. Además, defendió la innovación en el sector bancario que, a su juicio, debe ayudar a las tradicionales políticas monetarias en la recuperación de la estabilidad macroeconómica y financiera.Por último, concluyó que la regulación financiera del futuro debe estar orientada a reducir el riesgo sistémico.

Cebrián apuesta por las soluciones políticas

El presidente de El País, Juan Luis Cebrián, aseguró ayer que la crisis que asuela a Europa no es económica, sino política y de falta de liderazgo. Durante el Encuentro Financiero Internacional organizado por Bankia y El País, Cebrián insistió en que no hay que buscar las soluciones entre los economistas o los mercados, sino entre los dirigentes que han sido elegidos para marcar el camino ante un futuro incierto y marcado por la irrupción de China en la élite económica y militar del mundo. "La austeridad sin estímulo de los países europeos está destruyendo a las clases medias sobre las que se ha fundamentado la civilización europea de los dos últimos siglos", aseguró.Durante la charla gravitaron las dudas sobre la capacidad de Europa para mantener el Estado del bienestar. "No podemos mantenerlo, y si no, hay que explicar cómo lo vamos a financiar", enfatizó Cebrián.El presidente de El País modificó la frase del exsecretario de Estado de Estados Unidos Henry Kissinger, quien aseguraba que cuando el presidente de su país quería hablar con el líder de Europa, no sabía a qué teléfono llamar: "Ahora tendría que llamar a siete teléfonos diferentes: a los presidentes de la Comisión, del Consejo, del Eurogrupo, del BCE, al presidente de turno de la UE y además a Merkel y Sarkozy". Cebrián consideró que las medidas que Europa debe adoptar están claras: políticas comunes en el exterior, en defensa, en economía y fiscalidad, un decidido impulso a los eurobonos o que el BCE actúe como prestamista de último recurso, entre otras. "El problema es la rapidez a la hora de tomar decisiones. Todavía estamos discutiendo sobre el salvamento de Grecia", lamentó. Por último, contrapuso el letargo europeo con la enorme paciencia china. "No tienen prisa, pero tampoco conceden ninguna pausa", matizó.

Más información

Archivado En

_
_