Repsol garantiza que la prospección en Canarias no tiene "riesgo medioambiental"
El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha afirmado que las prospecciones petrolíferas en Canarias no tienen "riesgo medioambiental" y que, en todo caso, la compañía no acometerá ninguna acción "en contra" de los intereses de la sociedad canaria.
Brufau se ha expresado así ante los periodistas a la salida de su reunión con el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, a quien ha explicado los planes de la empresa para buscar hidrocarburos a unos 60 kilómetros de las costas de Fuerteventura y Lanzarote.
El presidente de Repsol ha puesto como ejemplo las exploraciones que se realizan frente a las costas de Río de Janeiro, un centro turístico de primer nivel, o las de Noruega y Dinamarca, "con 300 pozos más cercanos de 60 kilómetros y nunca ha pasado nada".
"Nadie nos puede dar lecciones, porque somos líderes en el respeto al medio ambiente, pero hay que pensar más lejos y ver qué hay de positivo para Canarias en esta actividad", ha señalado.
Si la exploración tuviese éxito, ha garantizado una inversión media de unos 13.000 millones de dólares ( 9.890 millones de euros) durante los 20 o 25 años que duraría la actividad, una cifra que generará "muchos" puestos de trabajo, a razón de entre 3 y cuatro empleos por cada millón de inversión.
"En España y en Canarias hay un problema de paro, y esto es una oportunidad para ocupar a más gente. Va a haber muchos puestos de trabajo, por ejemplo, en la construcción de cascos para las plataformas de producción y el transporte", ha señalado.
Según Brufau, se trata de una actividad de "alto valor añadido" que "complementará" al turismo y convertirá a Canarias en un "referente" de la sostenibilidad con centros de investigación o industrias de servicios.
Ha dicho también que la reunión de hoy ha sido el "primer paso" para explicar los beneficios de la actividad a la sociedad canaria, y que el proceso aún tardará unos dos años hasta que culmine la fase administrativa para obtener los permisos.
En esa línea, se ha mostrado a favor de que parte de los beneficios se queden en las islas. "Por nosotros, no hay problema. Ahora hay que trabajar y planificar que se puede hacer", ha apuntado.