Pagar hasta 3.500 euros más por IRPF en función de la comunidad autónoma
Una familia integrada por los cónyuges, una hija de cuatro años y un hijo de ocho meses, con unas rentas medias inferiores a 43.000 y una hipoteca puede llegar a pagar hasta 3.448 euros más si tributa por el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en Extremadura o Asturias, en lugar de en Castilla y León.
Según el estudio sobre fiscalidad autonómica elaborado por el Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF), la crisis ha traído consigo una tendencia a subir los impuestos, sobre todo el IRPF y el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, unido a la recuperación del Impuesto de Patrimonio para las rentas más altas, y la búsqueda por parte de las administraciones autonómicas y locales de nuevas tasas con el fin de conseguir dinero.
Así, el presidente del Consejo General de Colegios de Economistas, Valentí Pich, ha remarcado que tasas como la de servicios sanitarios u ocupación turística en grandes ciudades ya están encima de la mesa y darán que hablar en los próximos días.
Por su parte, el gerente del REAF, Luis del Amo, ha señalado que tras la subida estatal del IRPF aquellas comunidades autónomas que ya han incrementado sus tipos no tienen más margen de maniobra, por lo que lo único que podría pasar es que las que aún mantienen tipos inferiores a los que se aplicaban en 2010, como Madrid o La Rioja, se pongan al nivel del resto.
Las principales fuentes de recaudación impositiva en España siguen siendo el IRPF, el IVA y los Impuestos Especiales, que suman el 85% de la recaudación impositiva total, siendo el IVA el que presenta mayor capacidad para incrementar la recaudación.
Los tipos impositivos más altos
Además, el informe refleja cómo algunas comunidades autónomas españolas presentan uno de los tipos impositivos más altos de Europa para las rentas mayores de 300.000 euros, que pueden llegar a pagar hasta el 56%, siendo sólo superado por los de Suecia y Dinamarca.
Del mismo modo, recalca que el tramo final de una renta de 60.000 euros tributará al 47%, tipo de gravamen que también estaría entre los más elevados de Europa, aún teniendo en cuenta la tendencia de rebaja de los tipos en los impuestos directos.
"Hay comunidades autónomas con tipos impositivos del 56% y esto no es bueno para la toma de decisiones de inversión", ha destacado Pich.
Caída del impuesto de sociedades
En cuanto al Impuesto de Sociedades, el estudio afirma que de los grandes tributos es el que "peor" ha aguantado la crisis, e insiste en que en 2010 se quedó sólo en un tercio de la recaudación de 2007.
"La recaudación ha pasado de 44.000 millones a 15.000 millones, eso no se justifica con un descenso del beneficio de las empresas o los beneficios fiscales, hay más cosas, agujeros en el impuesto que preocupan a la Agencia Tributaria", ha remarcado Del Amo.
Para Del Amo, el impuesto está "muy sucio", "muy lleno de regímenes especiales" y necesita una "reforma profunda", ya que si se hubiera logrado la mitad de recaudación que se obtuvo en 2007 se habría aportado al presupuesto 7.000 millones de euros.
Recuperación del impuesto del patrimonio
Respecto al Impuesto de Patrimonio recuperado el pasado año por el Gobierno para rentas superiores a 700.000 euros, el análisis remarca que en 2008, año en que fue eliminado, representaba el 2,6% de los ingresos impositivos.
"Este tributo existe en pocos países y determinadas personas puntualmente pueden provocar deslocalizaciones , produciéndose en mayor medida por el tema de sucesiones y donaciones sobre todo en época de crisis", ha señalado el vicepresidente del REAF, Rodolfo Molina.
No obstante, el presidente del REAF, Jesús Sanmartín, ha insistido en que el carácter "transitorio" de este impuesto hace que la deslocalización de residencias sea prácticamente imposible.
Por último, los expertos han coincidido en las dificultades que causa al contribuyente la complicada regulación española, junto con los problemas que entraña en muchas ocasiones la técnica de la legislación tributaria autonómica.
"A los contribuyentes les es complicado saber lo que hay que pagar y cuando están dispuestos a abonarlos las dificultades son complejas