Rosell remonta a Arturo
El profundo calado de la reforma laboral impulsada por el gobierno de Rajoy ha dado alas a Joan Rosell en la CEOE. Hasta este momento eran muchos los que opinaban en la patronal que su presidente era un hombre de poco carácter y que eso había quedado sobradamente argumentado durante la última etapa de Gobierno socialista, cuando Zapatero apadrinaba minireformas que, según los críticos del presidente de la CEOE, no eran contestadas con la suficiente energía desde el frente empresarial.
En ese contexto, de cierta "laxitud", fue Arturo Fernández, presidente de la madrileña CEIM y vicepresidente de CEOE, quien se alzó con la portavocía de facto del empresariado. Personas cercanas a ambos dirigentes hablan de un auténtico pulso, de un derby Cataluña-Madrid.
Sin embargo, las medidas adoptadas ahora por el Ejecutivo del PP parecen haber sorprendido incluso en la patronal. En el número 50 de la madrileña Diego de León son muchos los convencidos de que Rosell ha sabido jugar sus bazas e incluso le reconocen haber llevado delantera a los sindicatos en el manejo de información. El hecho es que Arturo Fernández habla menos en público y hay quien dice que se inhibe a la vista de que Rosell vuelve a gozar de cierto crédito entre sus críticos de siempre.