El tándem FCC y Azvi gana obras ferroviarias en Europa del Este
FCC y su filial austriaca Alpine se han adjudicado un proyecto ferroviario en Rumanía por 246 millones. En el consorcio figura también la constructora andaluza Azvi, que refuerza de este modo su plan de internacionalización.
FCC es una de las constructoras consolidadas en Europa del Este, donde opera especialmente a través de su filial austriaca Alpine. Y Azvi es una de sus rivales, de la clase media española, que busca crecer fuera para amortiguar la caída de la contratación de obra pública en este país. Ambas han ido juntas a por contratos en Rumanía y se han adjudicado en consorcio una obra ferroviaria de 246 millones.
Todo un ejemplo de lo que se ha aconsejado a las constructoras españolas y empieza a cundir en el mercado: compañías medianas que tratan de aliarse con los grandes grupos para captar mercado exterior.
El citado tándem ha ganado la rehabilitación de un tramo de 28 kilómetros de vía ferroviaria electrificada entre las localidades rumanas de Sighisoara y Atel, en Transilvania. Su labor será habilitar la infraestructura para que pueda elevarse la velocidad de circulación hasta los 160 kilómetros por hora para el tráfico de pasajeros y hasta los 120 kilómetros por hora para el de mercancías.
El plazo de ejecución alcanza los 36 meses, en los que se construirán cuatro variantes con una longitud total de nueve kilómetros. Además, las empresas deberán remodelar dos estaciones, dos apeaderos y acometer un viaducto de 125 metros, y dos túneles que suman 1,37 kilómetros.
El proyecto se completa con la renovación total del sistema de electrificación, actuaciones en señalización y comunicación ferroviarias, y la reforma de algunas estaciones.
FCC tiene en Europa del Este una de sus principales zonas de expansión internacional. En el caso de Rumanía, la entrada de la compañía se produjo en 2004 y entre sus obras más destacadas figuran el paso urbano de Basarab, en Bucarest, con el mayor puente atirantado del país.
En los países vecinos la empresa que preside Baldomero Falcones está trabajando en Bulgaria y Polonia. En el primero de ellos levanta un puente de dos kilómetros de longitud y en el segundo construye cuatro de los estadios que serán sede en la Eurocopa de fútbol de este año.
El próximo reto: obras en el metro por 220 millones
FCC está decidiendo en estos momentos si acude a uno de los próximos concursos millonarios que serán promovidos en Rumanía. Se trata de la ampliación de la línea IV del metro de Bucarest, cuya ejecución alcanzará los 220 millones.Se da la circunstancia de que el grupo que preside Baldomero Falcones ya fue adjudicatario de la prolongación de la línea V en el suburbano de la capital rumana, además de ejecutar otras obras emblemáticas como la circunvalación Norte de la ciudad.Al parecer, su alianza con Azvi para atender el contrato ferroviario firmado ayer es puntual. Sin embargo, no sería extraño volver a ver a las dos constructoras españolas trabajando juntas en Europa del Este. Azvi cuenta ya con implantación tanto en la citada Rumanía como en Serbia, además de buscar negocio en América, Oriente Próximo e India.