Bernanke asegura que tomará todas las medidas necesarias para proteger a EEUU de la crisis de la eurozona
El presidente de la Reserva Federal estadounidense (Fed), Ben Bernanke, ha asegurado que la institución dará "todos los pasos que sean necesarios" para proteger a la economía y al sistema financiero de Estados Unidos del contagio de la crisis de deuda de la eurozona.
En una comparecencia ante el Comité de Presupuestos del Congreso estadounidense, Bernanke afirmó que la Fed mantiene "frecuente contacto" con las autoridades europeas" y seguirá vigilando de cerca la evolución de la situación.
En este sentido, recalcó que en términos globales la actividad económica parece haberse ralentizado en parte por el contagio de los problemas financieros y fiscales de Europa. "La combinación de altos niveles de deuda y las débiles perspectivas de crecimiento en una serie de países europeos han provocado significativas preocupaciones sobre su situación fiscal", añadió.
Ante esta situación, subrayó que resolver los problemas de Europa requerirá una acción "concertada" por parte de las autoridades europeas, quienes, en su opinión, están trabajando duro para hacer frente a sus desafíos financieros y fiscales.
"Sin embargo, se mantiene el riesgo de que los acontecimientos en Europa o en cualquier otra parte puedan evolucionar de forma desfavorable, lo que podría empeorar las perspectivas económicas aquí", subrayó.
Prioridad, reducir la deuda
Por otra parte, Bernanke incidió en que la prioridad en Estados Unidos para poder lograr la estabilidad económica y financiera debe ser establecer una política fiscal que garantice que el nivel de deuda se estabilice o, preferiblemente, descienda con el tiempo.
Sin embargo, señaló que, a pesar de la necesidad de hacer frente de forma "urgente" a las cuestiones relativas a la sostenibilidad fiscal, los políticos deberían preocuparse por no impedir de forma innecesaria la actual recuperación económica.
A este respecto, incidió en que, aunque las condiciones han mejorado en los últimos tiempos, el ritmo de la recuperación ha sido "frustrantemente lento, particularmente desde la perspectiva de los millones de trabajadores que siguen desempleados". Además, la lenta expansión ha dejado a la economía "vulnerable a las presiones".