Las pequeñas estaciones se quitan complejos
Precios asequibles y amplia oferta 'après-ski' hacen las delicias de viajeros y aficionados de toda España.
Una oferta de destinos tan amplia como cordilleras montañosas hay en la península Ibérica. Al margen de las renombradas estaciones conocidas por la mayoría, existen otras, que aunque pequeñas, ponen a disposición del esquiador un entorno incomparable, gastronomía suculenta y una gran oferta de ocio y hotelera. Todo ello, al mejor precio.
Queda claro que el esquiador medio prefiere deslizarse en amplísimos dominios, hacer uso de remontes interminables y tener los máximos kilómetros esquiables a su alcance. Sin embargo, en nuestro país la nieve es para todos los gustos y, cada vez más, ganan peso las escapadas de fin de semana, donde además del deporte blanco hay muchos rincones por descubrir. Los 33 resorts agrupados en la Asociación Turística de Estaciones de Esquí y Montaña (Atudem) han realizado una inversión para la temporada en vigor de más de 24 millones de euros. De este listado, apenas ocho podrían considerarse grandes complejos, el resto llevan a gala "ofrecer más por menos". Con la crisis, los esfuerzos para mejorar instalaciones son más complicados que nunca para una estación pequeña, sin embargo, continúan luchando por dar la misma calidad.
Por fin abren la mayoría de las estaciones invernales. Por menos de 30 euros (20 euros en muchas de ellas) se puede pasar un gran día de esquí en casi todos los rincones de nuestra geografía. Teruel resulta apetecible para los esquiadores. Javalambre y Valdelinares, en la frontera entre Aragón y la Comunidad Valenciana, son dos estaciones que resumen a la perfección el concepto de escapada blanca. A 350 kilómetros de Madrid o 130 de Valencia, son la oferta ideal para el aficionado que solo dispone del fin de semana. Además de esquiar, este entorno ofrece la posibilidad de disfrutar del legado mudéjar de la zona o de Dinópolis, un parque temático que muestra los hallazgos paleontológicos de la provincia.
La Rioja alberga otro de los placeres de nuestro país, el vino. Sin embargo, sus opciones no se quedan ahí. El resort invernal de Valdezcaray ofrece al esquiador 23 kilómetros de bajada y 22 pistas para disfrutar. Después de la nieve, nada como visitar los monasterios de Santo Domingo de la Calzada y de San Millán de la Cogolla, ambos declarados Patrimonio de la Humanidad. ¿Y por qué no? Quizá otra opción sea darse una vuelta por Logroño y disfrutar del ambiente y de la buena gastronomía en la famosa calle Laurel.
Igualmente, la Sierra de Gredos, entre Ávila y Toledo, resulta un marco inmejorable para disfrutar de una escapada blanca. La estación invernal de Sierra de Béjar- La Covatilla ofrece esta temporada lo mejor para ello, no en vano han reforzado la oferta para los amantes del snowboard. Además, a falta de nieve en la sierra de Madrid, se ha convertido en el destino ideal para los esquiadores madrileños.
Si se prefiere gastar un poco más en alojamiento, a pocos kilómetros de esta estación de La Covatilla se encuentra el Hotel Real de Bohoyo. Un establecimiento de cinco estrellas con grandes ofertas para esquiadores, que incluye el forfait los fines de semana.
Ranking mundial
Cerca de dos millones de personas en España practican deportes de invierno, lo que sitúa a nuestro país en la posición número 12 del ranking mundial de aficionados a la nieve. Este listado lo encabeza Estados Unidos, con más de 15 millones de esquiadores.
La Copa del Mundo, al cruzar la frontera
Es el dominio esquiable más grande de los Pirineos. Basta con cruzar la frontera y llegar hasta Andorra para disfrutar de 112 kilómetros de pistas y muchas opciones para los esquiadores.Pero Grandvalira ofrece más que bajadas esta temporada. La estación tiene dos citas señaladas en el calendario. La primera, el 11 y 12 de febrero, cuando se reunirá a la élite del esquí alpino femenino en la pista Avet (en la foto central), en dos pruebas del Campeonato del Mundo de esta modalidad. La segunda tendrá lugar los días 25 y 26 de febrero. Los esquiadores más rápidos intentarán romper el récord registrado hasta ahora en una de las pruebas de la Copa del Mundo de kilómetro lanzado en categoría masculina.¿Y si además se disfruta de todo ello con las mejores vistas? El Sport Hotel Hermitage & Spa de Grandvalira cuenta con una privilegiada orientación a la pista donde se celebrará la competición y ofrece paquetes exclusivos para disfrutar del espectáculo desde su piscina. También pone a disposición de los aficionados traslados en helicóptero desde Barcelona, acceso preferencial a la meta, para no perder detalle de la competición, y una amplia oferta gastronómica.