Castigo al bono, al Ibex y al euro
Primer castigo a los mercados en el nuevo año. Las dudas sobre la evolución de las entidades financieras y las exiguas medidas anunciadas en el Consejo de Ministros han castigado a los mercados de renta variable y de deuda. El Ibex se ha hundido un 2,94% y el riesgo-país de España ha superado los 380 puntos básicos. Mientras, el euro sigue a la baja y se sitúa en niveles de septiembre de 2010 frente al dólar.
Cuatro jornadas bursátiles de 2012 han bastado para ver que el nuevo año no ha cambiado nada y que las dudas sobre la situación de las entidades financieras y la evolución de las economías de la zona euro se mantienen intactas. El fuerte castigo al sector bancario ha lastrado la evolución de las Bolsas europeas. La peor parte ha sido para el Ibex, que ha cedido un 2,94% y ha cerrado por debajo de los 8.400 puntos. El Cac ha restado un 1,37% y el Dax un 0,21%.
Santander y Unicredit han continuado liderando los recortes en el sector europeo después de que el primero anunciara el canje de sus preferentes por acciones y que la entidad italiana comunicara que ampliará capital con un descuento del 43%. La entidad presidida por Emilio Botín ha cedido un 4,51% y Unicredit un 17,27%. Los rumores sobre que la necesidad de ampliar capital por parte de otras entidades han castigado también a Deutsche Bank, que ha cedido un 5,7%.
Más allá de las informaciones corporativas, el sector financiero español se ha visto perjudicado por los comentarios del ministro de Economía, Luis de Guindos, quien señaló el miércoles que las entidades necesitarían nuevas provisiones de hasta 50.000 millones ante su exposición al ladrillo. BBVA resta un 5,03%, Sabadell un 5,72%, Popular un 5,55% y Bankinter un 5,13%.
A la espera de la cumbre bilateral del lunes entre Merkel y Sarkozy, el foco de los inversores ha vuelto a la deuda de los países periféricos. El diferencial de la prima de riesgo española se ha situado en 376 puntos básicos, pese a tocar los 382, y su rentabilidad ha regresado a la cota del 5,6%. Similar escalada se ha visto en el riesgo-país de Italia, que se sitúa en 522 puntos básicos. Entre los gestores pesa la idea de que la liquidez ofrecida por el BCE no llegue a fluir hacia los créditos sino que sea utilizada para sanear las cuentas de las entidades financieras.
De poco ha sabido en el mercado el Consejo de Ministros español, del que se esperaba nuevas medidas de ajuste, y que se ha centrado en el estudio de varios informes sobre la economía sumergida y la retribución de los directivos de las entidades rescatadas.
Y nada ha podido hacer el buen dato de empleo privado de Estados Unidos de diciembre. La encuesta publicada por ADP ha mostrado unos datos mejores de lo esperado pero que no han logrado calmar el clima de tensión en Europa.
Además, el Tesoro francés ha acudido al mercado y ha logrado colocar cerca del máximo en deuda largo plazo a cambio de elevar el interés, en un momento en el que la triple A empieza a estar en entredicho después de las últimas advertencias efectuadas por las agencias de calificación ante la posibilidad de que las dificultades económicas hagan mella en la economía gala.
El desasosiego es visible también en el euro, que sigue con su tendencia a la baja y cotiza ya por debajo de los 1,28 dólares, niveles que no veía desde septiembre de 2010.