Construcción y PIB
Que nada será como fue en el negocio de la construcción es algo más que asumido por la economía española. Lo que ansían conocer en el sector es hasta qué punto se pierde peso respecto al PIB del país y dónde puede tocar suelo el que fue todo un vagón de arrastre. Un directivo con más de 30 años de experiencia en algunas de las mayores constructoras locales calculaba ayer, en una reunión muy restringida, que espera una contribución incluso por debajo del 6,5% respecto al PIB de 2011.
La cifra es dramática a la vista de que en el nefasto 2010, la construcción aportó el 9,2%, bajando desde el 10% del ejercicio precedente. La nueva realidad está lejos del protagonismo del 10,8% que la obra pública y la edificación tenían en la economía en 2006, en pleno auge del ladrillo y el hormigón.