Hacienda sube del 35% al 42% las retenciones a los consejeros
El nuevo régimen de retenciones salariales que acaba de aprobar el Gobierno incluye un importante aumento, del 35% al 42%, de los pagos a cuenta en el IRPF de los miembros de los consejos de administración de las empresas. Será efectivo a partir de febrero.
El prolijo decreto ley del Gobierno de medidas contra el déficit fiscal, aprobado el pasado viernes, esconde un sinfín de vericuetos por los que el Ministerio de Hacienda pretende no dejar ningún cabo suelto para conseguir un incremento de recaudación de 6.300 millones, vía subida del IRPF y del IBI. Entre ellos, figura una nueva tabla de retenciones salariales, adaptada a la citada subida del IRPF para los ejercicios de 2012 y 2013. Esta tabla incorpora el, llamado por el Gobierno "recargo de solidaridad" que no es otra cosa que una subida impositiva de entre 0,75 y 7 puntos, adicionales, en función de la renta salarial del contribuyente.
La nueva tabla de retenciones, que deberá ser aplicada a todas las nóminas desde el próximo mes de febrero, incluye una mención expresa a los pagos a cuenta de los miembros de los consejos de administración de las empresas, de las juntas que hagan sus veces y demás miembros de otros órganos representativos. Hasta diciembre, su retención fiscal era del 35%. A partir del 1 de febrero, este tipo se eleva hasta el 42%. El incremento coincide con el recargo máximo de siete puntos aprobado para contribuyentes con una renta superior a los 300.000 euros. Sin embargo, en el caso de los consejeros, el aumento del pago a cuenta se hará con independencia de las retribuciones salariales que perciban. En total, la Agencia Tributaria cuenta con recaudar 4.111 millones de euros extras por rendimientos del trabajo.
Productos de ahorro
Igualmente, Hacienda, ha procedido a adaptar las retenciones al aumento del gravamen del ahorro, también aprobado el pasado viernes. Para ello, ha introducido sendas modificaciones a la Ley del Impuesto de Sociedades y a la del IRPF por la que se eleva con carácter general del 19% al 21% la retención de un buen número de productos ligados al ahorro, cuya tributación se ha elevado entre dos y seis puntos, en función de la base liquidable. Entre ellos figuran los rendimientos del capital mobiliario, las ganancias patrimoniales derivadas de transmisiones o reembolsos de acciones y participaciones de instituciones de inversión colectiva (fondos de inversión y planes de pensiones). La subida de la retención del 19% al 21% se extiende también a los rendimientos procedentes del arrendamiento de bienes urbanos y los que se obtengan como consecuencia de la participación en juegos, concursos o rifas. Incluso, a los procedentes de la propiedad industrial y de la cesión de derechos de imagen. El aumento de las retenciones se extiende, asimismo, a los contribuyentes del impuesto de renta de no residentes para preservar un trato semejante con los 17 millones que fijan su gravamen a través del IRPF ordinario. En conjunto, el Gobierno espera recaudar 1.246 millones extras de las mayores retenciones fiscales al ahorro.
El sector financiero, molesto
Más allá de la cuantía de las nuevas retenciones salariales, los expertos fiscalistas han comenzado a lanzar las primeras alertas sobre la aplicación efectiva de las mismas y la incertidumbre que ello puede generar. Hacienda ha dado un mes (enero) de transición para adaptarse a esta situación. Este plazo parece demasiado corto para muchas empresas que cuentan ahora con parte de su personal en periodo vacacional. Especialmente preocupados están el sector de la banca y en los de los seguros y los fondos de inversión, admite a CincoDías Luis Bravo, socio del bufete Cuatrecasas. "Las retenciones que afectan a productos como dividendos, cupones, y acciones dependen de complejos programas informáticos que acumulan millones de datos y que no pueden ponerse en marcha en cuestión de días; sería deseable contar con algunas semanas más para que el sector financiero no acabe acusando costes innecesarios", avisa Bravo.
Prórroga
En el decreto del Gobierno sobre medidas fiscales se incluye también la prórroga para todo 2012 del tipo de gravamen reducido en el impuesto sobre sociedades, por mantenimiento o creación de empleo en las microempresas. La deducción finalizaba el 31 de diciembre.