Muchas menos hipotecas pero mucho más caras
El mercado de la vivienda atraviesa su peor momento. Cada nuevo dato que se conoce confirma que el ajuste del sector puede ser todavía más duro. La situación económica genera desconfianza y la banca se blinda restringiendo un crédito cada vez más caro. La concesión de hipotecas está en mínimos históricos y a un tipo de interés un 16% superior al de hace un año, según Estadística.
La firma de hipotecas acumula ya un año y medio de caída en picado y suma y sigue. En octubre registró el mínimo de toda la serie histórica del Instituto Nacional de Estadística (INE), que arranca en 2003. Apenas se constituyeron 22.193 hipotecas sobre viviendas, un 43,6% menos que en el mismo mes de 2010 y un 28% menos que en septiembre. El indicador lleva cinco meses consecutivos registrando descensos superiores al 40% y además cada vez son más pronunciados.
Las hipotecas se conceden con cuentagotas y a este ritmo el que ya es el peor año de la crisis podría terminar con menos de 10.000 préstamos otorgados en diciembre. En los diez primeros meses del ejercicio las viviendas hipotecas retrocedieron un 26,5% respecto al mismo periodo del año pasado. Lejos quedan las casi 100.000 hipotecas al mes que se despachaban en los mejores momentos del 'boom' inmobiliario.
Carlos Smerdou, consejero delegado de Foro Consultores, asegura que si octubre ha sido malo, noviembre y diciembre serán peores porque las transacciones inmobiliarias "han caído bastante" en el último trimestre del año. "La gente está esperando por un lado a que se concreten las medidas del Gobierno en materia de vivienda y por otro siguen llegando noticias de que los precios van a seguir bajando", explica. En estas circunstancias, asegura Smerdou, la demanda espera y no va al banco a pedir hipotecas. "La demanda está paralizada a la vez que las entidades son más exigentes a la hora de pedir garantías", matiza.
En definitiva, muchas menos hipotecas, sí, pero también mucho más caras. Las entidades financieras no se fían ni de la situación económica -las perspectivas no invitan al optimismo con un nuevo riesgo de recesión inminente- ni entre sí. Esta desconfianza se ha traducido en un encarecimiento de los costes de financiación. El tipo de interés medio se ha disparado casi un 16% en un año hasta situarse en el 4,33% en octubre. Hace doce meses bancos y cajas cobraban de media un 3,75% y por entonces suponía un 10% menos en tasa interanual. Pero doce meses atrás el mercado atisbaba un rayo de esperanza de recuperación que ahora se ha desvanecido por completo por el recrudecimiento de la crisis.
"Tienen sentido unos tipos más altos si pagan los intereses de los depósitos al 4%", aclara el experto de Foro Consultores. "El euríbor ha bajado, pero las entidades han subido los diferenciales para compensar", añade.
Son los bancos los que conceden un mayor número de préstamos hipotecarios (el 51% del total), pero también los que más los han encarecido. Mientras en octubre de 2010 el tipo medio era del 3,65%, ahora se sitúa en el 4,41%. Las cajas de ahorro, por su parte otorgan el 34,9% del total de hipotecas a un precio medio del 4,42% frente al 3,85% de hace un año.
El ajuste del sector continúa su curso y no parece que haya encontrado suelo a corto plazo. Prácticamente todos los indicadores del mercado de la vivienda marcan mínimos históricos -construcción, compraventas- y los expertos auguran un 2012 todavía peor si no se consigue mejorar el crecimiento y el empleo. Las hipotecas han pasado de ser el producto estrella de las entidades a su tesoro mejor custodiado.
Smerdou considera que una vez se sepan las medidas económicas del nuevo gobierno, "la demanda retenida volverá a comprar". Espera una mejora en el segundo trimestre del año que viene, pero el sector "continuará la travesía en el desierto", dice.