La mora roza los 132.000 millones y alcanza el 7,42% del crédito vivo
La mora bancaria cerró el pasado octubre en el 7,42% de la cartera crediticia. Es la cota más alta desde noviembre de 1994. En términos absolutos asciende a 131.908 millones de euros. Aun así, baja la ratio de impagados de las financieras.
Las entidades financieras todavía no despiertan de la pesadilla de los impagados. La tasa de morosidad mantiene su tendencia alcista. En concreto, esta ratio se situaba el pasado octubre en el 7,42% del saldo crediticio vivo. O dicho en otros términos, 131.908 millones de euros presentan problemas de pago, de los 1,779 billones que tienen prestados las entidades nacionales.
El sistema bancario ha incrementado su tasa de mora en 174 puntos básicos en 12 meses. En octubre de 2010 se situaba en el 5,68%. La situación ha registrado un empeoramiento más evidente desde la pasada primavera. De hecho, en medio año los impagados han crecido en un punto porcentual.
Echando la vista más atrás se puede apreciar que la actual cota de impagados es la más elevada desde noviembre de 1994. Durante la crisis bancaria de los años noventa la cota de impagados alcanzó un máximo histórico del 9,15%, pero también es cierto que la financiación otorgada era mucho menor que la actual.
El Banco de España prevé que los préstamos dudosos rebasen el 8%
En 2011, el deterioro de los impagados proviene esencialmente de las entidades de depósito, término que abarca tanto a bancos y cajas de ahorros como a cooperativas.
Merece mención especial el repunte anotado por Caja Mediterráneo (CAM), intervenida por el Banco de España el pasado verano. Los gestores designados por el supervisor han aflorado impagados a cierre de septiembre que representan casi el 21% de los préstamos otorgados. La entidad alicantina llegó a ser la cuarta caja de ahorros del país por activos antes de la crisis.
En contraste con las entidades de depósito, las financieras parecen enderezar su rumbo. Si bien todavía su mora es más elevada que la de bancos, cajas y cooperativas (ascendía al 9,04% al acabar el pasado octubre), esta se aleja progresivamente de la cota máxima del 10,24% registrada en agosto del pasado ejercicio.
La morosidad del sistema bancario no ha dejado de crecer en términos absolutos desde que estalló la crisis financiera en 2007. Sin embargo, el saldo crediticio vivo muestra una tendencia descendente desde 2009.
Fuentes financieras indican que el Banco de España revisó al alza el pasado septiembre sus estimaciones sobre la morosidad del sistema y ahora calculan que oscilará entre el 8% y el 8,5% al cierre de 2011.