La prima de riesgo cae a plomo tras la fuerte demanda en la subasta de bonos
El éxito de la subasta celebrada ayer por el Tesoro español apaciguó los ánimos en los mercados de deuda. La demanda de bonos se elevó a 11.214 millones de euros, de los que se adjudicaron 6.028 millones, muy por encima del objetivo máximo marcado, y a unos tipos de interés inferiores a los del mercado secundario. Ello propició que la prima de riesgo española bajara 28 puntos, hasta 349, con lo que amplía la brecha con la italiana, cuyo spread está 463. El Ibex 35 avanzó un 0,84%.
Amaina la tormenta sobre los mercados de deuda europeos, y sobre todo la que amenazaba al español. El creciente interés de los inversores particulares por los títulos públicos, gracias a las atractivas rentabilidades que han dejado las tensiones en la deuda soberana y el creciente interés de los inversores particulares, ha permitido al Tesoro español cubrir con creces sus objetivos en las dos últimas subastas. El martes, de letras a 12 y 18 meses, y ayer de bonos a cinco años y obligaciones a diez. Un apetito comprador que se ha reflejado en una fuerte demanda. Ayer el importe solicitado en deuda ascendió a 11.214 millones, de los que el Tesoro adjudicó un total de 6.028 millones, muy por encima de los 3.500 millones que se había marcado como máximo.
"El hecho de que en las últimas subastas se haya superado el importe previo se debe a que, aprovechando la recta final del año y la elevada demanda, el Tesoro ha decidido aumentar la cantidad que en principio pretendía colocar", explican en Ahorro Corporación. Esta firma destaca que las elevadas rentabilidades que ofrece en estos momentos la deuda pública, superior a productos bancarios como los depósitos, ha animado a los particulares a acudir en masa a las subastas. En los últimos días, de hecho, es habitual ver largas colas ante el Banco de España de minoristas interesados en adquirir deuda pública. Una tendencia que ya se observó en la subasta de letras del martes, en la que los particulares solicitaron títulos por un importe cercano a 800 millones.
El mayor optimismo acerca de una pronta solución a la crisis de la eurozona, tras los acuerdos de la cumbre del pasado día 9, permitió además al Tesoro reducir sus costes de financiación. Colocó los bonos a cinco años a un tipo de interés medio del 4,02%, frente al más del 5% que pagó en la anterior subasta por este plazo. Las obligaciones a diez años se emitieron al 5,2% y el 5,54%, por debajo de los precios del secundario.
El Tesoro coloca 6.028 millones, muy por encima del objetivo
Todo ello propició la brusca caída de las primas de riesgo. La española bajó ayer 28 puntos básicos, con lo que se sitúa en 349 y amplía su brecha con Italia, cuyo spread se encuentra en 463 puntos básicos. El francés está en 114 puntos básicos y el belga en 235.
Aunque de manera más contenida, las Bolsas también celebraron el regreso de la calma a los mercados de bonos. El Ibex 35 repuntó un 0,84% y terminó en 8.250, si bien los inversores aún no conocían la decisión de S&P de recortar el rating a 10 entidades financieras españolas. En el resto de mercados europeos las subidas también oscilaron entre el 0,6% y el 0,8%. Solo despuntó Milán con un avance del 1,37%. En Wall Street, el Dow Jones ganó un 0,38% y el S&P un 0,32%.
Solo Santander y BBVA se salvan de la rebaja de rating de Standard & Poor's
La agencia de calificación de riesgo Standard & Poor's (S&P) ha empezado su nueva criba por la banca española, después de que el pasado día 9 advirtiera que podía revisar el rating de todos los Estados europeos con triple A, la máxima calificación otorgada.Poco después del cierre de mercado, S&P anunció el recorte del rating de diez entidades financieras -Bankia, Banco Financiero y de Ahorros, CaixaBank, Catalunya Caixa, Ibercaja, Kutxa, BBK, Bankinter, Banco de Sabadell y Banco Popular-, aplicando de esta manera los nuevos criterios de rating anunciados el pasado 9 de diciembre, justo el día que los líderes europeos anunciaron los acuerdos para refundar la moneda única. De este nuevo mazazo solo se han salvado Santander y BBVA entre los grandes grupos financieros españoles.La agencia explica que el recorte es consecuencia de la actualización de sus criterios de medición y tras haber rebajado la calificación del Reino de España, hasta AA-, lo que supone un sobresaliente bajo.S&P explica que, además de esta decena de entidades españolas, tiene en revisión negativa desde la semana pasada a Banco Santander y su filial Banesto, así como BBVA y a la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA).La CECA no se ha incluido en la revisión de ayer porque su intención es hacerlo a principios de 2012, aunque no explica el porqué.
Colas en el Tesoro
La elevada rentabilidad que el mercado exige a la deuda pública española para comprarla ha despertado el interés del inversor de a pie. En la sede del Banco de España en Madrid se podían ver ayer colas de minoristas interesados en la subasta de letras del martes próximo.