Mercado con poco a lo que agarrarse
Van pasando los días, queda menos para el fin de año, y el mercado cada vez tiene menos cosas delante para mantener el optimismo. Como ya pasara en octubre, el efecto positivo de la reunión europea poco a poco se va difuminando y los mercados quedan a su suerte. Tal nivel de incertidumbre hace las cosas muy difíciles a la hora de tomar decisiones de medio plazo, cosa que es un buen argumento para ir cerrando libros.
Una de las oportunidades perdidas fue la decisión de tipos de la Reserva Federal que conocimos ayer y que cabía la esperanza de ver una nueva ronda de compra de activos con dinero nuevo. Esto no se produjo y la FED se mantiene en sus 13 con la operación Twist y manteniendo los tipos bajos hasta más allá de comenzado 2013.
En realidad no hemos visto nada que no dijera ya en noviembre, pero viendo lo que está pasando en Europa, siempre queda la posibilidad de ver a Estados Unidos tomar acciones para compensar lo que falta en el viejo continente. Allí siguen estando preocupados por los efectos que tenga la crisis europea en su economía, pero la Reserva Federal dice que, incluso con esa amenaza y efectos, su economía lo está haciendo moderadamente bien.
Si tenemos en cuenta el cierre de libros de fin de año, parece que es plausible que se utilice cualquier excusa para cerrar algunas posiciones que no nos interesen, como los comentarios de ayer de Merkel en donde cerró la puerta a una revisión de los techos del EFSF y del ESM que había sugerido Van Rompuy unas pocas horas antes para ver si esa cifra era adecuada o no. A decir verdad, Alemania está repitiendo lo mismo desde hace mucho, incluso lo anterior ya lo dijo el viernes, no es nada nuevo, pero como sabemos, el mercado está en un modo de Trading con titulares y el viernes es final de trimestre para los derivados, por lo que es normal que se busque un detonante para la manipulación que se suele ver por estas fechas.
Si miramos los gráficos de los índices o los futuros sobre índices, podemos ver que estamos teniendo un retroceso desde los máximos de este mes que es moderadamente tranquilo y ordenado, lo que siempre nos pone la alerta para poder ver una bandera si tenemos en cuenta la subida desde los mínimos de noviembre. Para ello siempre se está atento a los puntos clave de los retrocesos de Fibonacci desde los mínimos del mes anterior, pero con la bajada de ayer incluido el nocturno, nos estamos quedando casi sin referencias ya que el futuro del DAX está ya buscando la última del 61.8%.
Estas referencias pueden quedar sin valor si desde los mercados de energía se genera un ataque a las economías mundiales por medio de una fuerte subida de los precios del crudo. La tensión con Irán cada vez es más alta y las dudas acerca de las sanciones que puede tomar la Unión Europea sobre las importaciones de crudo de ese país también. Ya se ha avisado sobre las consecuencias de unas sanciones que pueden provocar daños a nivel global si se toman por unanimidad de todo el planeta o bien de forma unilateral por Europa. En el segundo caso aparecería una ventaja de los compradores asiáticos sobre ese crudo, cosa que a lo mejor ayudaría a controlar la inflación en China y eso representa otra ventaja más con respecto Europa. En el primer caso, que las sanciones se tomen de forma unánime, dejarían al mundo sin una porción del suministro mundial de crudo y generaría una subida de los precios que, tal como están las economías del primer mundo, nos daría más problemas que soluciones.
Ayer tuvimos un repunte importante del crudo que ya hace un aviso de esto, aunque el índice de energía del S&P pasó de ganar un +2% a cerrar -0,5% por la fuerte devaluación del euro debido a la inflexible postura de Alemania.